Capítulo 23: Felicidad ambigua

348 53 16
                                    

Llego de día de la boda de Lincoln y Syd, todos los miembros de la familia Loud y la familia Chang asistieron a la boda;  el señor Chang entrego a Syd a Lincoln, aunque en el fondo a Lily le hubiera gustado ser llevado por su verdadero padre el sr Lynn; luego le dio poca importancia, porque lo más importante era estar casada con Lincoln, aunque fuera el cuerpo del otro lo soportaría por ser la mujer de Lincoln. 

 El sydcoln se dio el sí, y se besaron sellando su unión, cuando la novia arrojo el ramo de flores cayo en las manos de Adelaida, su hermana se acercó a ella para felicitarla, luego en la ceremonia estuvieron platicando. 

 –No te parece que las cosas han ido muy rápido – dijo Adelaida. 

 –Siempre he soñado con el día de mi boda – respondió Syd. 

 –No era como yo lo recordaba, recuerdo que cuando éramos niñas siempre hablabas de formar una banda de k-pop, te desconozco. 

 –Adelaida, me he enamorado, he encontrado al hombre de mi vida. 

Este es el mejor día de mi vida, esperaba contar con tu apoyo.

 –Lo siento, es que cuesta trabajo creer que te hayas casado con Lincoln cuando apenas llevaban 3 meses de noviazgo. 

 –Cuando, te enamores me darás la razón con el tiempo. 

 Terminada la ceremonia, la joven pareja fue a su luna de miel; un viaje cerca de las costas de Florida por tres días, alquilaron un hotel con una gran vista al mar, cierta noche Sid propuso hacer el amor en la playa bajo la luna llena, la idea fue muy atractiva para Lincoln, así que lo hicieron, pero Sid no quería usar protección y quería hacerlo a modo natural. 

 –Cielos Sid es como si no te importara quedar embarazada – dijo Lincoln algo sorprendido. 

 –Tal vez tengas razón, yo estaría feliz que esta misma noche me embaraces. 

 –Pero que hay de nuestros planes de fundar una disquera, no crees que un bebé podía prolongar esa meta. 

 –No lo entiendes Lincoln, esta tarde te di el sí de ser tu mujer, ahora nada me haría más feliz que empezar a forma nuestra familia; tú has tenido varias hermanas, me gustaría tener la misma cantidad de hijos. 

 –No, la verdad yo quisiera tener unos dos o tres hijos. Lo digo por experiencia de haber nacido en una familia tan numerosa. 

 –Como tú quieras Lincoln. 

 Hicieron el amor apasionadamente, se besaron, se toquetearon, Syd le hizo una mamada hasta que se corriera, y Lincoln le lamio su vagina y beso sus pechos; luego de haber recuperado su virilidad tras la primera eyaculación, penetro a su esposa, y Syd le dijo que no se atreviera a correrse fuera de ella, Lincoln obedeció y eyaculo dentro; Syd sintió como todo el semen de su esposo se esparcía en su interior; sintió una adrenalina de placer y entusiasmo que en algunos meses seria madre. Mientras pasaban los días Sid se observaba al espejo como crecía su vientre, cuando su criatura empezó a dar sus primeras patadas se emocionaba, su sueño estaba haciendo realidad, nada podía arruinar esta felicidad pensaba ella. 

 – Ya tengo muchas ganas de conocerte Sylvia, la anterior Lily me hablaba mucho de ti en su diario; y pensar que yo seré tu madre – decía Sid a su bebé – como han cambiado las cosas, pero descuida yo no te decepcionare, seré una buena madre y tendrás mi amor incondicional.

 Los 9 meses pasaron en un abrir y cerrar de ojos; Lincoln llevo a Sid al hospital cuando ella tenía los síntomas del parto, entraron a la sala, Lincoln filmaba a su esposa cuando estaba dando a luz; fue una experiencia grata y muy dolorosa a la vez, pero valió la pena cuando tomo a Sylvia en sus manos, por fin conoció a su hija; el peliblanco también estaba feliz dejo de grabar para cargar a su hija. 

 –Es muy bella – dijo Lincoln – se llamará Sylvia. 

 –Es un lindo nombre – respondió Sid – me la das mi pecho esta hinchado quiero amantarla. 

 El bebé regresa a los brazos de su madre, Sid se descubre su pecho y le da su leche, fue una sensación maravillosa, esta agradecida de que su bebé no haya nacido deforme como a la anterior Lily; su vida estaba hecha, no podía pedir nada más, esperaba ser madre por segunda vez el próximo año. 

 –Creo que se parece mucho a ti – dijo el padre mientras grababa a su bebé tomando su leche. 

 –Es cierto, tiene mis ojos, mi color de cabello me siento afortunada. 

 –Ambos lo somos, trabajare arduamente para que no le falte nada a ti ni a Sylvia.  

 –Todo saldrá bien, mientras estemos unidos como familia, esta nenita es una bendición, espero que pronto me diga mamá.

Continuará...

Solo te quiero para mí (Lilycoln)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora