6.

1K 94 15
                                    

Be Happy.

Pov Omnisciente.

— Que alegría volverte a ver, Angélica —habló Arthur, deteniendo su caballo frente a la chica, quien al verlo no pudo evitar querer llorar un poco—.

— Arthur... —sus miradas se encontraron una vez más, igual que en aquel entonces, en las afueras de Camelot, muy cerca del atardecer—.

Se miraron por algunos segundos, antes de que Angélica negará con la cabeza y empezará a caminar del lado contrario de donde se encontraba el rey, recordando las palabras de Merlín ese día. Arthur sabía que algo no andaba bien y se dispuso a poner su caballo enfrente de la joven impidiendo su paso.

— Disculpe, su majestad. Necesito ir a recoger algunas frutas al campo —dijo Angélica sin ver a su joven rey—.

Arthur bajó de su caballo y tomó las manos de la joven. Ella se negaba a mirarlo, al chico no le gustaba el comportamiento que ella había tomado de repente.

— Angélica... mírame, por favor —la chica algo avergonzada miró al joven rey quien tenía un semblante serio— ¿Paso algo con Merlín ese día?.

— No, todo está bien, su majestad. Debería volver al palacio, seguramente está sin permiso por aquí y- El chico tomó a la joven a forma de princesa y la subió a su caballo para seguidamente subirse el— ¿Que es lo que hace, alteza?.

— Creí que habíamos quedado en que podías llamarme Arthur —su caballo empezó a trotar por las afueras de Camelot cerca de los campos— Quiero que me seas totalmente sincera con lo que pasó después de que me fuí.

— No se de que me habla, no pasó nada entre la señorita Merlín y yo —dijo Angélica bajando su mirada—.

— Angélica... —dijo su nombré en un murmullo y ella negó su cabeza—.

No quería meter en problemas a su rey sólo por que ella se enamoró de alguien quién nunca la amaría, le había quedado muy claro después de lo que habló con Merlín.

Flashback.

Miró como su rey se alejaba en su caballo, quedando sola con la hechicera y confidente del rey.

¿Lo amas? —su pregunta la tomó por sorpresa—.

Lo pensó un momento, no quería mentir acerca de lo que sentía, así que solo asintió, a lo que la hechicera se acercó, la tomó de los hombros e hizo que la mirará.

¿Que hace, Señorita Merlín? —miró a la mayor de manera sorprendida—.

¿Lo quieres por su dinero o solo por qué quieres saber lo que es ser una princesa? —la mirada que Merlin le daba a Angelica era una de total desprecio, así que la menor quito las manos de la mayor de sus hombros—.

¡Mi amor no es de esos!, Yo... de verdad lo quiero, incluso si el fuera un chico pobre lo amaría, no me importa su dinero, ni tampoco quiero sentirme una princesa... ¡Sería feliz con tan sólo estar a su lado! —Merlín solo se limito a sonreír de manera burlona—.

He estado cuidando a Arthur de todo mal... —su sonrisa y mirada burlona cambiaron a un semblante serio y enojado— de personas que solo quieren aprovecharse de él, no pienso dejar que eso se arruine por un capricho de una chica como tú, no podrías defenderlo si alguien lo atacará, ¡morirás primero y junto contigo la esperanza de todo Camelot! —Angélica abrió sus ojos a más no poder—.

No quería aceptarlo pero sabía que Merlín tenía razón, ella no podría defenderlo de nada, en cambio la hechicera sí. No se podía comparar con ella, simplemente no podía.

Forever yours (Meliodas y Arthur) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora