La Forbes Rechazada. -Klaus Mikaelson

Capitulo 22

Narra Blake.
Habíamos bajado del avión ya, estábamos a punto de tomar un auto hacia la casa de Klaus, Elijah paró un carro y los tres nos subimos, el auto se puso en marcha.

Klaus: Te gustará Nueva Orleans. -Me dice.

-Espero y me de tiempo de conocerlo un poco. -Reí.

Klaus: Y con gusto te lo mostraré.

Elijah: Pero para que puedan hacer eso con total tranquilidad primero debemos encontrar a Aurora.

-¿Podrían sacarle los ojos y la lengua cuando la encuentren? -Dije un poco irritada.

Elijah: Creo que tiene un poco de sed de sangre y está irritada por eso.

Klaus: Se ve sexy así. -Toma mi mano, luego de unos minutos en el camino el auto se estacionó fuera de la que supongo que es la casa de Klaus, Elijah se bajó y luego nos bajamos Klaus y yo.

Klaus: Bienvenida a mi humilde hogar. -Dice entrando a la casa.

-Está muy lindo el lugar. -Dije analizando todo a mi al rededor.

Klaus: Y todo tuyo cuando quieras.

-¿Tienes algo de sangre? No me siento muy bien.

Klaus: Claro que sí. -Dió algunos pasos y habló con un chico que estaba a unos metros de nosotros.

Klaus: En unos minutos te traerán algo de sangre fresca, vamos a mostrarte la que será tu habitación por el tiempo que estés aquí. -Subió las escaleras y yo le seguí el paso, abrió una puerta y entramos en esta, era una recamara muy grande y linda.

Klaus: Espero te guste.

-Está muy hermosa.

Klaus: Ahora quiero que vengas conmigo, te presentaré a mis hermanos. -Me tomó de la mano y me llevó hacia una habitación, entramos a esta y había una chica rubia y un chico castaño.

Klaus: Blake, ellos son Kol y Rebekah, mis hermanos. -Los señaló.

Rebekah: Un gusto linda, espero y soportes a mi hermano para que te lo lleves lejos. -Rió.

Kol: ¿Es tu novia?

Klaus: En eso estoy, Kol. -Me mira.

Rebekah: Pero yo veo que se gustan y además, están agarrados de manos. -Miró hacia nuestras manos.

Kol: Cariño, si te aburres de mi hermano aquí estoy yo.

Klaus: Creo que ya recordé dónde guardé la daga que estaba buscando.

Kol: Es broma, Disfruta Nueva Orleans, Blake.

-Es un gusto conocerlos. -Les dediqué una sonrisa.

Rebekah: Puedes contar conmigo para salir, ir de compras, cualquier cosa que quieras hacer.

-No conozco mucho este lugar pero puedes contar conmigo también.

Klaus: Blake, acompañame, ya trajeron lo que pediste. -Salimos de la habitación y bajamos las escaleras hasta la sala, ahí había una chica.

Klaus: Puedes beber toda la sangre que quieras, está hipnotizada, no gritará ni dirá nada. -Yo me acerqué a esta y mordí su cuello, se sentía tan bien, luego ví que que Klaus mordió el otro lado de su cuello, ambos estábamos bebiendo de la misma chica, aún no me acostumbraba a esto pero era muy placentero, me despegué de aquella chica y Klaus hizo lo mismo.

Klaus: Espero lo hayas disfrutado. -Se acercó a mí y limpió un poco de sangre que había en mi labio con su dedo, este me miró a los ojos fija y seductoramente.