INTRAESCOLAR II (Under The Dome)

Capítulo 7: "Túneles y Caminos" Parte 3.

Una pareja entró tambaleándose en el comedor. Las corrientes de aire se habían agravado y el cabello de los chicos estaba cubierto de tierra.

-¡Ayuda! -pidió Joshi Valois-. ¡Mi novia no puede respirar!

Los alumnos se alertaron y todos se acercaron a la puerta para ver lo que ocurría.

Brenda De la Peña venía en brazos de su novio y su dificultad para respirar era muy evidente.

-¿Qué pasó? -preguntó Julio haciendo espacio en una mesa.

-Ella fue por mí a las huertas -dijo Joshi-. Cuando veníamos de regreso empezó a toser con fuerza y no trae consigo su inhalador.

-¿Tiene asma? -comprendió Julio-. ¿Hay alguien aquí que tenga un inhalador?

Los alumnos se fueron viendo entre ellos.

-¡Yo tengo uno! -gritó Valeria Acosta del 4A-. Era de mi hermano.

La chica lo sacó de su mochila y Julio lo tomó rápidamente. Lo llevó hasta Brenda y la forzó a darle un par de caladas.

Todos miraban expectantes esperando la reacción de la chica. Con algo de dificultad pudo reanudar su respiración. Una ola de alivio recorrió a los alumnos.

-¿Ahora lo ven? -cuestionó Julio-. A ella le afectó primero por tener asma, pero conforme vaya pasando el tiempo nos irá afectando a todos hasta matarnos de asfixia.

Los chicos veían de Julio a Brenda, quien poco a poco se reincorporaba.

-Sé que ya no confían en mi -dijo Julio-. Y no les pido que lo hagan, solo pido que miren allá afuera y se den cuenta del peligro que nos asecha.

Los alumnos miraron por las ventanas y parecieron reflexionarlo.

-Haré de nuevo la votación -continuó Julio-. Quien esté a favor de hacer algo para detener esto, levante la mano.

Brenda y Joshi fueron los primeros. Después Valeria Acosta y poco a poco todos estuvieron de acuerdo, incluso Rosa Zapata y Alex Melendey.

-Perfecto -dijo Julio viendo el resultado-. Les diré lo que debemos hacer.

*

-¿Lo tiró aquí dentro? -preguntó Erika anonadada-. ¿Cómo se supone que lo sacaremos?

El grupo de chicos estaba reunido alrededor del pozo. La zona era protegida de las polvaderas por el exceso de árboles a los costados.

-Erika tiene razón -dijo Karely-. El huevo es pesado y no creo que flote en la superficie del agua, seguro está en lo profundo del pozo.

-O puede que la corriente del agua lo haya llevado lejos -aportó Frida-. Capaz y ya está fuera del Domo.

-Los pozos no tienen corriente -corrigió Karely-. El agua brota del subsuelo.

-Como sea -respondió Frida quitándole importancia a su error-. No podemos meternos ahí dentro.

-No necesitamos entrar -dijo Jonadan asomándose al pozo-. Podemos hacerlo salir.

-¿Cómo? -preguntaron las tres chicas al unísono.

-La primera vez que estuvimos en contacto con el huevo fue tocando la superficie del meteorito al mismo tiempo -dijo mirando a Erika-. Y por lo que me cuentan, ustedes liberaron al huevo del mini-domo tocándolo también al mismo tiempo.

Karely y Frida asintieron.

-Hay que tocar nuestras manos por encima del agua -sugirió Jonadan-. Esa podría ser la manera de que recuperemos al huevo.