Nota de autor al principio: bien, solo falta el epilogo y les revelo una sorpresa allí 🥺❣️ nos leemos esta noche o mañana.
⭐⭐⭐
Eran las ocho de la noche cuando James salió acompañado por el padre de Luke, ambos en silencio caminando a la par. Retuve la respiración esperando a que alguno hablara, pero solamente la manera en que Alexandre Heinrich miró a su esposa, me dejó saber que algo había salido bien.
Y pude respirar con normalidad, sintiendo esperanza.
—La operación fue un éxito, pero…—comenzó a hablar el padre de Luke, con voz suave pero algo en su tono destacó, haciéndome percibir que no todo estaba bien, y ese «pero…»? me lo confirmó. Él bajó la mirada y después de un segundo la alzó—, el diagnóstico no es bueno, cariño. Esta grave, ha sufrido un golpe en la cabeza que le ocasionó una lesión cerebral traumática a la que nos sabemos como va a reaccionar, si es que puede reaccionar por si mismo.
—¿Eso que significa? —pregunté.
James me miró, Elisabeth Heinrich sollozó.
—Luke no respira por si sólo —me respondió mi hermano—, lo esta haciendo con ayuda de un respirador artificial. Su corazón responde bien, pero su sistema no. Él no reacciona a estímulos. Esta en coma, Lexi.
—¿Pero puede salir de eso, cierto? ¿Está fuera de peligro, verdad?
Mi voz se halló desesperada y prácticamente suplicó porque la respuesta fuera positiva incluso si era mentira. James me miró a los ojos y no me respondió nada, todo lo que escuché fue un pitido romper en mi oído y el llanto de la madre de Luke que me hizo empeorar a mi.
—Te llevo a casa, Lexi —murmuró James.
—No quiero ir a casa —me rehusé, con voz quebrada—, quiero ir con Luke, necesito ir con él.
—Esta en observación, en cuidados intensivos recibiendo demasiada atención por parte del personal —Alexandre me comunicó, abrazando a su esposa—, hoy no lo puede ver nadie, Lexi, apreciamos que te preocupes, pero ve a casa, linda. Ven mañana por la mañana si quieres, necesitas descansar.
¿Cómo podía descansar cuando el amor de mi vida estaba en un juego consigo mismo por ganar su vida o perderla?
No podía hacerlo.
—No es justo —reclamé, sintiendo las lágrimas deslizar mis mejillas—, no me pueden pedir que me vaya.
—Lexi —Paris me llamó, con tono suave, pero la ignoré. Tenia mis ojos puestos en los padre de Luke—, vamos a tu casa ¿si? Yo iré contigo.
—No, no quiero.
—Lexi —esta vez fue James quien me llamó.
—No me quiero ir, no me obliguen, por favor —rogué.
No estaba bien, mis nervios me jugaban en contra y la idea de que Luke no tuviera un buen diagnóstico no me permitía irme de aquí. No podía dejarlo, me abracé a mi misma y meneé mi cabeza.
—Esta es la cosa, hermana. Tienes que irte y venir mañana, porque incluso aunque no puedas verlo hoy, el horario de visita termina en una hora, y si sigues alterada, me voy a ver en la obligación de darte algo para calmarte los nervios —pronunció James—, y no quiero ser el malo.
No podía, me rehusaba. Pero una parte de mi sabia que si no me iba, si no lo hacia, las cosas serian peor para mi. Respiré profundamente y hacerlo fuera como si inhalara fuego porque me quemaba. Pasé mis ojos por cada persona conocida en la sala de espera y por último los dejé más tiempo en los padres de Luke.
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Noches De Verano
Teen Fiction«A Lexi le gusta Ashton, el mejor amigo de su mejor amigo, a Luke le gusta Lexi, su mejor amiga. El verano después de la graduación llega: el ultimo verano juntos, para ellos y su grupo de amigos. Conforme pasan los días y las noches, los sentimient...