Don't Cry [Jaesung]

10

Jisung solo había acompañado a sus padres al supermercado porque estaba muy aburrido en casa y, a parte de escuchar música, no había mucho más que hacer.

E incluso estaba teniendo la oportunidad de encontrar un presente para Jaemin, pues sentía que debía agradecerle por todo lo que, gracias a su ayuda, había logrado.

No sabía si podría dárselo en navidad, es decir, mañana, pero al menos lo compraría para entregárselo cuando regresara a la escuela.

Pero no todo estaba siendo color de rosa, no había encontrado algo que le gustara y tampoco estaba muy seguro de qué tipo de cosas le gustaba a Jaemin, por lo que la elección estaba siendo muy difícil.

Podía preguntarle en estos momentos, Jaemin lo había llamado cuando estaba en el sector de lácteos -se había quedado sin leche-, pero quería que fuera una especia de sorpresa.

- Voy a colgar para no molestarte. O no más- su risa se escuchó del otro lado de la línea-. Feliz navidad, Jisung.

- Pero aún no lo es- corrigió.

- Lo sé, pero mañana es un día especial, supongo que no quieres que te moleste mañana.

Después de aquella noche en la que habían estado hablando hasta dormirse, las llamadas diarias, a cualquier hora del día, se habían hecho habituales. Y en esos momentos, Jisung no sabía porqué le molestaba tanto que mañana no hiciera lo mismo de las dos semanas anteriores.

- Tampoco es que sea tan especial- murmuró entre dientes, con molestia.

Sin embargo no creyó que Jaemin lo escuchara-. De acuerdo. Creo que debería llamarte por mi propio bien mañana. Ten una linda tarde, Jisung.

- Adiós, Jaemin.

Jisung colgó y sonrió para continuar con su compra. Buscaba los objetos que su madre había puesto en la lista, a la vez que buscaba algún regalo para Jaemin.

Una vez tuvo todo en su cesta de compras, regresó al lugar que había acordado con sus padres una vez terminaran. Mientras él buscaba los productos normales de casa, como vegetales, frutas y ese tipo de cosas, ellos se encargarían de buscar las cosas para la cena de mañana.

A decir verdad a Jisung no le importaba mucho la navidad, no lo veía como un evento tan importante. Tal vez era porque la navidad pasada sus padres se habían enojado y habían comenzado a pelear. En resumen, para Jisung, la navidad apestaba. Pero no del todo, tampoco le parecía tan malo, tenía sus momentos buenos, pero no estaba seguro de si en su familia eso podría ser así.

Entonces se preguntó qué estarían haciendo los chicos en estos momentos. Desde el día que todos salieron juntos, los cinco, sin contar a Jaemin y a él, por supuesto, todos se habían hecho mucho más cercanos. Bueno, ellos se habían acercado más a Jisung logrando que el otro se abriera con ellos. Como era obvio, aún no sentía la confianza suficiente con ellos. Pero debía admitir que el tiempo que pasaba con ellos era divertido, por lo que dejaba que comenzaran a decir lo tierno que era y jugaran con sus mejillas, y tal vez, lo molestaran un poco con eso.

Aunque le parecía curioso que con el que más tiempo había pasado, era el que nunca lo molestaba sino que solo se reía de sus muecas cuando lo adulaban.

Caminado rumbo al punto de encuentro acordado, algo llamó su atención logrando que se detuviera en su caminar.

Lo había encontrado.

Había encontrado el regalo perfecto.