Fire Drill; K.th

Dekaennéa

10 de Octubre, 3064. Múnika del oeste, Mapleterre.

—. Presidenta Baku.

Mirana levantó su vista observando a Taehyung en la entrada de su oficina, ella sonrió ligeramente y le invitó a pasar con un gesto de su mano. El joven le obedeció entrando completamente en la habitación y tomando asiento frente a ella en su escritorio.

—. ¿Como has estado, Kim?—preguntó la ex general acomodando las cosas sobre la mesa para que no hubiese distracciones en su platica—. ¿Preparando la boda?

—. Poco a poco, sí.—respondió cohibido—. ¿A qué viene la invitación? Si puedo preguntárselo...

Mirana frunció sus labios y formó una mueca, parecía como si no tuviese las palabras para describirle a Taehyung lo que estaba sucediendo y la razón por la que lo citó aquella mañana en su despacho.

—. Tengo dos asuntos importantes que tratar contigo antes de que sea muy tarde.—dijo por fin la mujer levantándose de la silla y rodeando el escritorio para tenerlo más cerca—. El primero tiene que ver con tu boda.—Taehyung palideció en cuanto escuchó aquello, no pensaba que duraría mucho sin decirle nada a nadie, pero no esperaba afrontarlo tan pronto—. Tengo la responsabilidad de guardar los registros civiles que tenía Ítalo antes de la desintegración de Kalon, pero representa un problema para ti.

—. Argus lo dijo antes, no quise creerle y ahora me lo dice usted...

—. Lo he tenido sobre mi como una avispa, no lo menciones.—mencionó Mirana reposando su cabeza sobre sus manos con cansancio—. ¿Cuánto tiempo se lo puedes ocultar a Ara?

—Taehyung desvió su mirada de la de Baku por un momento y soltó un suspiro—. El tiempo que usted me dé.—contestó encogiéndose de hombros.

—. No tengo mucho.

El castaño agachó su cabeza con decepción ante la respuesta de Mirana, sin embargo, cuando lo procesó levantó su vista hacia ella y frunció su ceño mirándole fijamente. No podía hablar en serio, no, era una mentira, no podía ser...

—. No se refiere a que...

—. Hagan su ceremonia lo más pronto posible.—interrumpió ella—. Mientras más pronto mejor; Ara está embarazada y le vendrá mejor hacerlo antes de los últimos meses de embarazo.

—. Presidenta Baku...

—. En cuanto a los papeles civiles me encargaré yo, me costará mucho hacerle un acta de defunción a Oriana, pero lo haré con tal de poder tener su acta de matrimonio lista y después-

—. ¡Mirana!—Baku por fin dejó de hablar y miró a Taehyung a los ojos, deteniéndose por completo—. ¿Qué se supone que haga sabiendo que...que no tiene tiempo?

Mirana se mantuvo en silencio durante un momento, volviendo a procesar sus palabras dentro de su mente para poder decírselo a Taehyung, quien le miraba confundido, dolido, triste.

—. Yo...tengo cáncer.—contestó finalmente devolviendo sus ojos a los del joven frente a ella—. Quiero que este lugar sea lo más democrático posible, pero...no puedo someterlos a una votación tan rápida solamente para morir.—una pequeña lágrima salió de su orbe derecho, surcando su mejilla hasta desvanecerse por su barbilla—. Es el segundo asunto que quería atender contigo.

—. No, General, no puedo...—Taehyung cerró sus ojos apretando sus párpados y dejando salir sus lágrimas también—. ¿Yo? ¿Está segura?

—. Taehyung, si hay algo cierto es que yo ya no soy tu General ni tú mi soldado...pero no hay nadie más a quien le pueda confiar mi pueblo. Nuestro mundo...