Capítulo 33

163 16 3
                                    

Roberta:

Embarazada. Estoy esperando un hijo, un hijo mío y de Diego, porque si, es de Diego, esto es lo mejor que me pudo haber pasado, seré mamá. La felicidad que siento en estos momentos y realmente inmensa, aunque aún sigo preocupada por lo que paso, yo no me acosté con Santiago, de eso estoy completamente segura, Diego tiene que creerme, esto es una trampa y no pienso quedarme tranquila hasta que la verdad se descubra. Diego me mira impaciente esperando mi respuesta, muerdo mi labio inferior y me acercó a él.

Roberta: Si, si es tuyo mi amor, jamás dudes de eso. –Acarició su rostro y suspira aliviado.

Diego: Solo hay una manera de averiguarlo. –Me mira serio y me toma de mi muñeca izquierda.

Roberta: Ay, idiota me lastimas. –Me quejo y siseo de dolor.

Diego: Más de lo que tú me lastimas a mí, ja no lo creo. –Dice irónico y me aprieta un poco.

Roberta: Diego, en serio me duele, basta. –Vuelvo a quejarme. Me ignora y hace que me suba en su auto. __ ¿A dónde me llevas? –Pregunto mientras hago círculos en mi muñeca y hago una mueca de dolor.

Diego: A comprobar que ese bebé sea mío. –Dice serio y lo miro dolida. No puedo creer que este dudando así de mí.

Roberta: Neta no puedo creer que me estés diciendo esto. –Digo enojada y sonríe irónico.

Diego: Te acostaste con tu esposo, te vi, no sería descabellado pensar que te has acostado con el antes. –Dice con amargura y respiro profundo mientras cierro los ojos. Los abro y lo miro furiosa.

Roberta: ¡Este bebé es tuyo! ¡No me acosté con nadie que no fueses tú! –Grito molesta. Me mira por un momento, pero vuelve su vista al camino.

Diego: Veremos. –Comenta y ruedo los ojos mientras gruño. En serio se está comportando como un niño, no puedo creer que actúe así, 15 minutos más tarde ya nos encontrábamos caminando por los pasillos de la clínica donde atiende Giov.

Roberta: Te vas a tragar tus palabras, te lo juro, Diego. –Digo seria y bufa. Entramos al consultorio de Giov y este alza una ceja en cuanto nos ve.

Giov: Hola, nos vimos hace unas horas, ¿Que sucede? –Pregunta y se acerca a mí al ver mi cara de pocos amigos.

Diego: Quiero comprobar...

Roberta: Este imbécil quiere comprobar que mi bebé sea de él. –Interrumpo seria aún y Diego me mira mal por cómo le dije. Igual se lo merece porque eso es lo que es, un imbécil por no creer en mi palabra.

Giov: Ay mi niña, ven vamos a hacerte el chequeo. –Me abraza por los hombros y me lleva hasta una camilla. __Acércate, Bustamante. –Lo mira serio. Diego asiente y se acerca hasta el borde de la camilla. __Bien, Rob levanta tu blusa. –Me pide con cariño y así lo hago. Toma un gel y lo pone en mi vientre, tiemblo un poco porque este frío. __Con esto sabremos con más detalles sobre tu bebé. –Pone el aparatito sobre mi estómago y empieza a moverlo. Diego mira atentamente la pantalla al igual que yo.

Roberta: Pollito, no veo nada. –Murmuro y me hace una seña para que espere un poco.

Giov: Aquí está. –Sonríe y lo miro impaciente. Diego se acerca un poco más. __ ¿Ven este punto blanco que está aquí? –Señala con su dedo y asiento. __Bueno este es el bebé, felicidades mi niña. –Sonrió como tonta y siento como mis mejillas se humedecen a causa de mis lágrimas. Diego mira fijamente la pantalla y sonríe un poco.

Diego: ¿De cuánto está? –Pregunta con voz ronca. Giov me mira y sonríe.

Giov: Tiene exactamente 6 semanas, está completamente sano, todo marcha muy bien. –Contesta a Diego. Suelto un pequeño sollozo y lo miro dolida.

Diego: Eso quiere decir que...

Roberta: Que es tuyo jodido imbécil. –Digo entre dientes mientras lloro. Noto como Giovanni se incomoda.

Giov: Bueno yo voy a darte las vitaminas que tienes que tomar, los dejó para que hablen. –Se aleja y yo me siento. Diego limpia su rostro porque unas cuantas lágrimas se deslizaron por sus mejillas.

Diego: Esta todo bien, yo me haré cargo, no te voy a dejar sola en esto. –Aclara su garganta. Lo miro decepcionada.

Roberta: Yo sé que lo harás, porque yo si confío en ti, Diego. –Me levanto y se posiciona en frente de mí. __Por primera vez en la vida te pido que no me dejes, yo te necesito, quiero que estés junto a mí, porque cuando no estoy contigo todo es oscuridad y sufrimiento para mí, por favor quédate conmigo. –Pido al borde del llanto completamente quebrada.

Diego: Te aseguro que voy a estar para ti con todo lo que tenga que ver con nuestro hijo, pero no me pidas que este contigo como pareja porque no va a pasar. Tú me mentiste, me engañaste, te burlaste de mí, y eso es algo que no te pienso perdonar. –Dice frío. Su rostro vuelve a llenarse de lágrimas y yo sollozo mientras escondo mi rostro en su cuello.

Roberta: Por... Favor... –Suplico entrecortado. Se separa de mí y niega.

Diego: Ya no más, Roberta, ya no más. –Intenta irse pero lo detengo.

Roberta: Diego por favor...

Diego: Te espero afuera. –Me ignora y se va dejándome ahí sola.

Roberta: ¡Ahg! –Apretó mis puños con rabia y me tomó del cabello mientras lloro.

Giov: No puedes seguir así, Rob primero porque puede darte una crisis, y segundo porque tienes que cuidarte, cuidarte por él. –Apunta mi vientre y asiento triste mientras limpio mi rostro con mis manos.

Roberta: Dame las vitaminas para irme. –Pido con voz llorosa y me abraza. Lloro un poco más en su hombro y besa mi frente.

Giov: Ten, por favor guarda reposo, nada de estrés ni de trabajo en exceso, tu próxima consulta es dentro de 15 días, por favor mi niña, cuídate. –Acaricia mi mejilla y sonrió triste.

Roberta: Esta bien, yo te lo prometo. –Lo abrazo una vez y sonríe de lado. __ te quiero. –Beso su mejilla y salgo de su consultorio. Buscó a Diego con la mirada y al verlo por fin siento como mi corazón se destroza, esta de lo más feliz coqueteando con una chica rubia. __Dieg... –Lo llamó y voltea a verme sin importancia.

Xxx: Bueno, nos vemos lindo. –Le sonríe y deja un beso sobre sus labios.

Es ahí donde se derrumba mi mundo.

Princesa (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora