Cap 28. Quiero tener cachorros.

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- ¿Entonces nos mudaremos?

Jimin estaba comiendo cuando Jay soltó aquella pregunta, su mente estaba en una bruma extraña así que tardo en entender lo que él trataba de decirle.

- ¿O él se mudará acá? Por mi no hay problema, yo no puedo pagar un alquiler solo y que me dejes abandonado no es opción.

Jimin solo se empezó a reír por la actuación de su hermano.

- Aunque, si me preguntas, me gusta este departamento - el alfa se notaba muy preocupado por su futuro inmediato - yo elegiría seguir viviendo aquí.

Jimin siguió comiendo. No había ninguna prisa, había decidido ir aceptando las cosas que el alfa quisiera darle y había prometido tener pasciencia para ir a su ritmo.

Al fin y al cabo tenía una marca permanente en su cuello, era de él y de nadie más.

- Anda hermano dime qué no me dejaras.

- No es tan mala idea dejarte solo.

- Pero tu me amas, recuerdas - el alfa alzó sus palillos en forma de ruego.

- Solo lo haría para que entres en rigor alfa malcriado.

Jay lo miraba con tristeza.

- ¿Entonces? ¿Me cambiarás por él?

- Algo así.

- Rompes mi corazón, sabes.

- Extrañaré mucho tus comidas - agregó Jimin comiendo lo último de su plato levantándose para lavarlo y salir a la calle donde ya lo esperaba Jungkook.

- ¡Hermano no lo dices enserio! ¿O si?

- Adiós alfa tonto.

Una semana llevaban siendo pareja y parecía que el tiempo había pasado muy rápido.

Jimin subió al auto de Jungkook cuando esté le abrio la puerta.

- ¿Estás listo para correr?

- Acabo de comer, podrías ir un poco más lento hoy. - Murmuró Jimin sonriendo de media luna - a veces eso es mejor, recuerda.

La expresión del alfa de confundido hizo reír al Omega.

Bajó la mirada de Jimin, el rubio brillaba en carisma, cada gesto parecía cosa digna de analizar con detalle, el alfa sonreía así que la atención de Jimin se fue a sus labios.

El beso que vino después le hizo cerrar los ojos y suspirar aliviado por su cercanía.

Jamás había se había sentido tan comprometido con alguien, a decir verdad, le gustaba que esto fuese así, le hacía querer más y más de él, pues no solo era sexo y caricias mal intencionadas como con otros alfas, era algo más, algo más dulce y lleno de cariño, ahora el tenía su corazón de forma sincera.

- Será mejor que nos vayamos - Jungkook terminó el beso y Jimin regresó a su asiento sin notar que se había ido sobre él de forma torpe en el poco espacio que tenían.

Jungkook manejó despacio como él se lo pidió y en silencio tomó la mano de Jimin entre la suya.

- ¿Cómo va tu marca? - sorteó el rubio.

Jimin dirigió su mano hacía su cuello mirándolo de reojo.

- Cicatrizó muy bien.

Él alfa acarició su mano suavemente con su pulgar. Todos los días le hacía la misma pregunta, aunque podría tener connotaciones más profundas,  Jimin contestaba de forma natural, no se arrepentía de haberla pedido a pesar de todas las consecuencias que está tuviera.

Alfa GuardianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora