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Encuentro a Edik Nikolev en la biblioteca, busca unos libros que no estén en galino para Javier. Paso por un estante y encuentro los libros de historia de otros países. Se los paso a Javier, me agradece con un brillo en los ojos y me acerco a Ed. Cierra un libro y lo acomoda un poco molesto en el estante. 

-¿Cómo sabes de esos libros?

-A veces me harta escuchar galino por todos lados, leer otros idiomas me despeja la mente - le digo -. ¿Qué hace él aquí?

-Así que sabes quién es.

-Todos lo saben - me cruzo de brazos -. Su cara hinchada y llena de lágrimas estuvo en las primeras planas de las noticias internacionales por dos semanas. 

Ed suspira. 

-Quiere saber que hizo a Gala firmar la paz con Marley - me cruzo de brazos. 

-¿Va a contratar tus servicios, Sariel?

-No - sonríe -. No quiere arriesgarse a que Delphine sea la siguiente mensajera. Así que, si tienes una copia de la alianza, sería de mucho uso. 

Frunzo el ceño. Me relamo los labios y me cruzo de brazos. 

-Desgraciadamente, solo tengo para mi Gala. Pero puedo mandar un mensaje a Klaus, que Javier quiere la paz. 

-Está pensando en ella. Al igual que mi hermano. 

-Hablas de él cómo si fuera un obstáculo. 

-Solo un terco que no le agrada tanto la idea de estar en paz con el país que mató a nuestra hermana.

-Eso es entendible - me cruzo de brazos -. ¿Nos vemos en la noche para planear la muerte de Binger?

-De hecho, iré a dar una vuelta, para refrescarme la memoria. Estoy seguro que tú ya te la sabes de memoria. 

-Sí. Te odio. 

-Lo sé, preciosa - me guiña el ojo.

Me pregunto si sentirá una punzada en el pecho cómo yo cada que coquetea como solía hacerlo antes de haber pasado una noche juntos. Me pregunto si sólo lo hace para cumplir con la estúpida promesa que hizo en el pasillo. 

-¿Se quedará aquí? - regreso el tema a Javier.

-No, se quedará en el hotel Plaza de la Reina- asiento. 

-Bueno, me tengo que ir. Ten cuidado, Ed. 

Sonríe por un segundo. 

-Dilo de nuevo. 

-¿Ed?

-Como si en verdad lo quisieras decir. 

-Ed - repito -. ¿Qué tiene?

Se relame los labios y sonríe. 

-No se escucha tan mal cuando lo dices tú - alzo ambas cejas. 

-¿Por qué te cambiaste el nombre? 

-Porque lo escogió mi padre, el hombre que nos dejó a nuestra suerte. 

-¿Y de dónde sacaste Sariel? 

Gira sobre sus talones y pasa la mirada por el estante más cercano, sonríe al encontrar un libro. Leo el nombre, algo sobre criaturas míticas de otras religiones. 

-Sereen tenía ese mismo libro, de ahí lo saqué. 

-Así que no te gusta tu nombre. 

-Hasta hoy - sonríe. 

-Ya - retrocedo y choco con un estante, Ed se ríe un poco -. Tengo que irme. 

Me doy media vuelta y saldo del escondite creado por los estantes de libros y el cuerpo de Sariel. Tengo que prepararme. Buscar ropa con la que Sariel no me haya visto trabajar, cuchillos que no me haya visto usar. Podría ir sin mis cuchillos, solo tengo que darle un buen susto Javier y ya. 

Despair (ReinerBraunxLectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora