PACTOS INESCRITOS {H.P, D.M. Y TU}

ESTOY AQUÍ

RAYITA.

No entiendo nada y además, quiero preguntarlo todo. Y por querer hacerlo, termino balbuceando como una loca.

—Pe... pe... pero, ¿Malfoy? ¿Fryer? ¿Cómo es que llegaron aquí? Y... pareciese que son ellos los que mandan.

No me mira. Luce un poco avergonzado.

—No soy un hombre de mano dura. Benjamín sin embargo... era un líder nato.

—Bueno... ¿y que más pasó?

—Con la poca influencia que me quedaba en el ministerio en Inglaterra, ayudé a tu madre a colocarse en un puesto muy importante, uno que dejó vacante un difunto tío mío. Relaciones exteriores. Así, ella sacaba información sobre que tanto tenía de conocimiento el ministerio en estos lados. Y además logró vaciar algunos archivos de búsquedas.

Se volvió muy astuta y por su cargo, nadie sospechaba de sus viajes durante el año. Tiempo en el que venía a visitar a tu padre. Poco después, nació tu hermano. Fue la primera vez que Benjamín pensó en mudarse de nuevo a Londres. Pero supo que si quería darles una mejor vida, tenía que hacer el esfuerzo de trabajar desde lejos"

—¿George también nació aquí? —interrumpí.

—No—dijo sin más —Él era un citadino de nacimiento. Pero...

—¿Pero? —pregunté cuando se detuvo.

—Él también sintió un gusto por toda esta vida. Vino un tiempo antes de...

Se que no quiere decirlo. Pero yo se que significa.

—¿Antes de que lo mataran?

John me mira.

—¿Y cómo es que Fryer se quedó?

Trato de desviar el asunto de mi hermano a algo menos doloroso. John se relame los labios y le da un sorbo grande a su té.

—Como todo iba yendo muy bien, nos dimos cuenta de que era demasiado para trabajarlo solo nosotros dos. Así que trajimos gente de otro lados. Jornaleros y criaturas. Para que trabajaran la tierra y las minas. Pero bueno, recordarás que para esos tiempos, cierto mago tenebroso reinaba por sobre muchos lados y muchas personas.

Pronto, el rumor de tierras fértiles y prosperas se regó hasta llegar a los mismos oídos de lord Voldemort. Y envió a un sequito de mortifagos a husmear, fueron meses terribles. Porque encontraron exactamente lo que buscaban y saquearon ante nuestras débiles fuerzas, todo lo que pudieron.

Dejaron a unos cuantos, para supervisar que todo siguiera produciendo. Tu padre y yo contra esos, no éramos capaces de contenerlos, así que doblamos las manos. Y Fryer era, quien más entusiasta estaba de producir minería en masa.

Tu padre quiso retirarse una vez más. Pero entonces supimos de la caída del mago obscuro y nos mantuvimos firmes un poco más"

—Y mamá estaba embarazada de mí —agregué.

Él dejó soltar el aire un poco.

—Si, así es. Tu ya venias en camino. Eras, lo único bueno que llegó de esos años obscuros. Porque, a pesar de que el que no debe ser nombrado cayó, eso no significó que volviéramos a ser los de antes. Fryer supo como sacarle provecho a la tierra, y llegamos a un acuerdo. Pero vinieron tiempos de sequia y hambre y no pudimos sobrellevarlo.

Todo se salió de control. La gente que no podía salir, consumieron a las criaturas. Sin importarles su dolor, o que trabajaban juntos. Una cacería sin escrúpulos.