Capítulo 17

363 28 8
                                    

Su codo se mantenía enterrado en la almohada, fungiendo de su parte en su brazo, mientras un costado de su cabeza se encontraba recargado contra los nudillos de su mano.

La miraba dormir, sus ojos estaban cerrados suavemente y las facciones de su rostro estaba completamente relajadas. Apreció con detalle las marcas de sus manos sobre la blanca y blanda piel del cuello de Kanzaki. Ayer por la noche, en su segundo round, los dos debían admitir que se habían descontrolado. Por eso no le sorprendía que aún se encontrara durmiendo.

Lentamente y sin intenciones de despertarla depósito una caricia con su dedo pulgar sobre el labio inferior de Ichigo, recordando el sabor de ellos y como una noche anterior los besaba con tanto, desespero, pasión, violencia, deseo y amor...

Dabi realmente estaba obsesionado con su belleza y su esencia. Quizás, podia admitir que en verdad estaba enamorado... Mucho.

— ¿Qué estás haciendo..? —la mañanera y ronca voz de la pelimenta se hace audible. No había abierto sus ojos, pero su entrecejo se frunció y se removió entre las sabanas, relamiendo sus labios.

El corazón del villano latió con fuerza, pero este lo ignoró y aproximó su rostro al de ella para depositar un beso fugaz sobre la punta de la nariz de Kanzaki, quien esbozó una sonrisita y entreabrió sus ojos.

— ¿Disfrutaste follarme anoche? —preguntó juguetón el azabache teñido cerca del rostro de su novia, tomando por sorpresa su pegrunta para nada discreta.

Ambos aún se encontraban sin ninguna prenda de vestir, tan sólo eran las cubiertas de la cama.

— Yo no te follé —aclaró entredientes —, te hice el amor. —volvió a sonreír algo tímida, mientras sus mejillas se encendían en un color carmesí.

Dabi suelta una risotada algo absurda y no porque su comentario de ella lo fuera, si no que, estaba enternecido y más por la expresión dulce y linda que la joven mantenía en su rostro.

— Lo que sea. —replicó y besó sus labios de forma casta.

— ¿Sabías que tienes unos muslos anchos? —preguntó Kanzaki adormilada, escondiendo su rostro en el pecho de Dabi, causando que este alzará una ceja en dirección del oculto rostro de su novia.

Vaya, era la primera vez que alguien le hacía un comentario cerca esa parte de su cuerpo.

***

Dio una vuelta con aburrimiento en aquella cómoda silla que forma parte del inventario de su despacho. Esta sería la hora en la que Ichigo estaría atravesando las puerta de su oficina, sin embargo, esta no era la ocasión, la salud de su madre era prioridad ante todo. Dejó ir un suspiro y algo curioso llevó sus manos al teclado de su ordenador. Su nariz se frunce al igual que sus labios al recordar esa extraña actitud de su asistente personal.

Nagachika Seidō

Era tan extraño, que realmente con inocencia y curiosidad se ánimo a buscar el nombre del trabajador de Kanzaki en el buscador. El rubio se removió en su lugar y su entrecejo se frunció, mientras sus ojos leían con velocidad lo que Internet le había brindado.

Seidō Dimitriev Nagachika; ex-militar ruso (2015)  de la élite militar especialida en operaciones de mandos superiores en Moscú, Rusia...

Talló sus ojos, esto no podía ser cierto. No, seguramente había muchos Seidō Nagachika por todo el planeta. Algo frenético llevó el indicador de su mouse hasta el apartado de "imágenes", esperando encontrarse con alguna fotografía del hombre, sin embargo sólo aparecieron funcionarios públicos del mismo gobierno ruso. No había ninguna  foto sobre el Seidō que conocía.

control; Hawks/DabiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora