30 Días RyuKyo

Día 2/ Caricias

Nota: Por culpa de los FanArts, veo el Ryukyo muy... Apasionado...
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— Ukyo, ya es tarde. ¿No vas a casa? — pregunta Gen quién estaba recogiendo los exámenes de sus alumnos.

Ukyo deja el bolígrafo con que estaba revisando las actividades de sus alumnos y mira el reloj, ya iban ser las siete de la noche.

Le da una sonrisa nerviosa a su amigo y trata de calmarlo — Es que tengo cosas que hacer, planes de evaluación que realizar y exámenes que revisar

— Pero si la hoja está en blanco — dice Gen quitandole el papel donde supuestamente estaba escribiendo — Dime, soy tú mejor amigo. Cuantame lo que te pasa, ¿te peleaste con Ryusui-Chan?

Ukyo suspira y se cubre la cara su gorro — Ojalá fuera eso.

Gen se sienta a su lado y con una sonrisa traviesa lo anima para hablar.

— ¿Tú querido Senku-Chan no te espera? —pregunta Ukyo tratando de desviar la conversación.

Gen le responde con una sonrisa de orgullo — Mi querido Senku-Chan tiene un proyecto que entregar este fin de semana.

— ¿Cuál proyecto?

Gen lo mira ofendido y lo golpea con el papel que estaba enrollado — El bautizo de los trillizos, eres un mal padrino.

Ukyo se ríe y por fin se decide contarle la verdad a su amigo — Ryusui es demasiado....bueno tu ya sabes, bueno no sabes porque ni haz salido con él, aunque Ryusui y Senku al ser mejores amigos tal tu querido sea igual, lo que quiero decir es que bueno, yo.

— ¡Ukyo! ¡Por todos los dioses ve al grano!

—Ryusui es demasiado apasionado y yo no sé decirle que no, coloca una carita de perro abandonado y me ablanda el corazón — confiesa el de ojos verde u cabello platinado a su mejor amigo, lo mira y lo ve todo sonrojado.

— Pues, que tengas buenas noches. Nos vemos mañana Ukyo-Chan — Gen recoge sus cosas y ya estaba listo para irse.

— ¿En serio? Eres un psicólogo reconocido — se queja Ukyo por ls huida de su amigo — ¿no me vas a dar ningún consejo?

Gen solo sonríe nervioso y le responde — No te puedo dar ninguno, porque yo tampoco se como decirle que no a Senku-Chan, pero si encuentras un modo me avisa.

Gen sale por la puerta de la oficina y ve como Francois entra.

— Joven Ukyo, ¿está listo para irnos? — pregunta el dulce mayordomo.

— ¿Puedo irme a mí casa? — pregunta Ukyo al amable ser.

Francois lo mira raro, para después sonreírle con ternura — Le recuerdo que su casa se la vendió al joven Taiju y la joven Yuzuriha.

Ukyo asiente al recordar ese pequeño hecho y toma sus cosas, toma una respiración profunda y estaba completamente decido a decir que no.

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Ukyo se muerde los labios, estaban en el despacho de su apasionado novio y tenía miedo que alguien del servicio escuchara. En ocasiones pensaba que todo el mudno tenía un oído sensible como el suyo, muerde los labios al sentir como las manos se Ryusui se paseaba por sus piernas para después morderlo por esa zona.

Las manos suben hasta tocar su abdomen mientras que Ryusui lo miraba con deseo, el muy idiota le sonríe provocativamente a la vez que lame el interior de sus piernas sin apartarle la mirada, observa como una de las manos del capitán va a su miembro y lo masajea con sumo cuidado.

— Te tardaste hoy — dice Ryusui sin apartarle la mirada y después lamer el miembro ya rojizo de su amante.

Ukyo trata de callar sus gemidos lo mejor que podía, pero le era imposible. Trato de alejarse un poco, pero las manos firme de Ryusui lo sostenía contra él.

El chico de ojos ámbar sonríe al ver a su novio todo sonrojado y con la respiración agitada, era demasiado hermoso para sus ojos y quería más, iba hacer que Ukyo fuera completamente suyo todos los días si le era posible.