30 Días RyuKyo

Especial +18

Este es un pequeño especial, primero porque desde hace tiempo que le debía un omegaverse, segundo es un pequeño especial de la historia que está en mi mente, tercero quería ver como salía y cuarto a ver como lo tomaban? No se si será agregado a la historia principal que se viene o en verdad es un pequeño especial.

Espero que le guste y que se entienda y es como una practica?

Lo siento por cualquier error o incomodidad.

***********

Ukyo aunque fuera un beta no le podía negar nada a Ryusui, el alfa tenía algo que lo hacía caer bajo sus encantos.

Tal vez era su mirada o la forma que lo besaba, tal vez era la manera que lo abrazaba con fuerza. Como si quisiera fundirse en él, amaba la manera en Ryusui lo tomaba.

Sabía que estaba mal, que él y el dragón eran de mundo completamente diferente. Ukyo hacia todo para cumplir con la justicia y encerrar los malos. Y Ryusui era todo lo contrario, era el mismo infierno en persona.

Deja de pensar tanto y se concentra más en los besos del chico, Ryusui le quita la camisa por encima de su cabeza y lo vuelve a besar mordiendole los labios ocasionando que sangrara un poco.

Pero eso no le importa a ninguno de los dos y siguen con el beso, Ukyo empuja a Ryusui sobre la gran cama y se sienta sobre su entrepierna, mordiendo sus caderas mientras que Ryusui lo ve con fuego en la mirada y acaricia sus muslo.

Ve como el dragón se ríe y arquea su espalda mientras que suelta una risa, vuelve a fijar su mirada en él y sus caderas.

Gime al sentir como Ryusui lo está penetrando aún con las ropas puestas.

El Dragón lo acerca más hacia él y lo besa en los labios, expresando toda la pasión que llevan por dentro.

Ukyo es ahora quién le quita la camisa y la tira lejos, acaricia el fuerte abdomen del alfa y lo comienza a besar, pasando su lengua en cada musculo del cuerpo.

Ryusui lo aleja y Ukyo observa como el dragón acerca la boca a su cuello, para morderlo. Primero en la manzana de Adán y luego a los costado.

Ukyo no puede más con tantas emociones y se corre.

Escucha a Ryusui reírse y le dice cerca de su oreja — Que buen chico eres ángel, pero aún falta por correrme yo.

Ryusui le devora los labios y lo acuesta en la cama, para quitarle el pantalón y dejarlo completamente desnudo.

— Eres un desastre — le dice Ryusui quitándose ahora él los pantalones.

Ukyo con la respiración cansada mira la acción y se asusta al ver el tamaño de su pene.

— Si fueras un omega no te dolería nada, pero no te preocupes haré que sea lo menos doloroso para ti.

El dragón se masajea su miembro y Ukyo se queda hipnotizado por lo que ve.

Ryusui sonríe y une su erección con la de Ukyo, aunque el de su ángel estuviera débil en ese momento.

Ukyo se tapa la boca para tratar de tapar sus gemidos, aunque ya fuera algo tarde por todo el ruido que hizo hace cinco minuto.

Ryusui le quita la mano y mirándolo con una sonrisa le dice — Bebé, ¿cuáles son las reglas que debes seguir? ¿si no quieres que yo haga algo malo?

Ukyo entre jadeos lo mira y se quita la mano, pero no responde solo lo atrae hacia sí mismo y lo besa en los labios, donde las lenguas de ambos pelean por el dominio.

Entierra sus manos en los cabellos dorados de ese hombre creado para cometer pecado y siente como le toma de las piernas, para abrirlas y adentras en ellas.  Donde la mano que no atiende sus erecciones se colea en su ano, adentrando uno de sus dedos.

Duele, pero sabe que es por lo momentos. Que es un pequeño castigo por no responderle a sus preguntas, si tan solo Ryusui supiera que eso no le molesta y es todo lo contrario. Pero si se lo dejaba saber, era capaz de buscar otra forma de torturarlo.

Aleja sus labios y con la respiración agitada le dice que le duele.

Ryusui se le queda mirando un rato, pero retira su mano. Se aleja de él y Ukyo siente frío, pero sabe que es por un momentos porque el alfa está buscando el gel para que no le duela.

— Esto no fuera necesario, si tan solo fueras un omega — dice Ryusui entre dientes.

Ukyo baja la mirada y pero le responde — No estoy preparado.

Ryusui suspira y toma la barbilla de Ukyo, mirándolo a los ojos. Era su método para saber si le estaba mintiendo.

No logra ver nada, el alfa toma su cara y lo acerca a su miembro.

Ukyo pasa saliva, era grande y aún no se acostumbraba al sexo oral. Pero trata de hacer su mejor trabajo y cree que lo hace bien al escuchar los gruñido de placer por parte del dragón.

Lo retira cuando siente que está apunto de llegar y pasa sus dedos por sus labios.

—Como amo esa boquita tuya, me da tanto placer en todos los sentidos.

El de ojos ambar sonríe y lo besa una vez más, donde su lengua llega hasta su garganta alejando después con un hilo de saliva y colocando sus dedos.

Ukyo los lame de la misma forma que hizo con su miembro y mirándolo a los ojos, podía ver la pasión y lujuria crecer en el dragón.

Ryusui retira sus dedos y vuelve posicionarse sobre su ángel, mientras que se colocan gel en los dedos y lo calentaba un poco, para luego meterlo poco a poco dentro de ese ángel pecaminoso.

Ukyo arquea su espalda y siente dos dedos entrar en él, pero no era suficiente quería más de Ryusui.

— Ryusui, por favor.

El dragón sonríe y entierra otro dedo dentro de su ángel, se ríe al ver como el lindo beta se mueve solo autopenetrandose. Es cuando decide meter un cuarto dedo y Ukyo arquea su espalda de placer.

Ryusui no hace nada, solo ve como ese pequeño beta busca su propia satisfacción hasta correrse.

Quién pensaría que el pequeño beta que antes no sabía nada de sexo, podía ser tan lujurioso.

Ryusui se lame los dedos, aunque no fuera un omega podía sentir el sabor de Ukyo en sus dedos.

Toma su pene y lo dirige al agujero del pequeño ángel.

Ukyo abre los ojos al sentir a Ryusui dentro de él y se aferra a una de las almohadas cuando el dragón comienza a moverse dentro suyo.

Ninguno de los dos dejan de bailar al son de la pasión, no importaba si sus gemidos podían escucharse fuera de las paredes o que la cama rechinara tanto, solo importaba consumir ese fuego que los dos sentía.

Ryusui levanta a Ukyo y hace que lo abrece, para moverse más profundo. Ukyo gruta de placer y siente que se viene otra vez, su cuerpo se mueve solo y se aleja de Ryusui, temblando todo y manchando la cama.

Ryusui lo mira entra fascinado y frustrado, le encantaba ver la reacción de Ukyo. Pero él no se había corrido todavía, no espera que su ángel tome un respiro y lo voltea teniendo su hermosa espalda a la vista y lo vuelve a penetrar.

Ukyo se aferra a una de las almohadas y trata de sostenerse con todas sus fuerza, una vez Ryusui empieza era muy difícil de detener hasta el siguiente día que estuviera algo cansado.