Día 24

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Reconciliación:

Ryusui toma su bufanda y estaba apunto de salir cuando ve a Ukyo entrar por la puerta principal, su emoción sería ir corriendo para abrazarlo. Pero no sabía si sería prudente después de la discusión que tuvieron, sobre todo al tratarse de un tema delicado.

— Le diré a los socios que hoy no podrá estar presente — dice Francois que estaba detrás de él y bajando las escaleras, saluda a Ukyo de forma respetuosa como siempre y sale por la puerta principal.

Él termina de bajar las escalera y se acerca a su pareja, ¿por qué seguían siéndolo? Nunca dijeron la palabra terminar.

— Hola — saluda Ukyo sin mirarlo a los ojos, Ryusui siente una pesadez en el pecho. Una de las cosas que más amaba de Ukyo eran sus ojos jade.

— ¿Quieres hablar en el despacho? — pregunta él señalando una de las puerta del gran salón.

— Si.

Ambos caminan al lugar y es él quién abre las dos puertas para darle acceso a Ukyo. Ve como el más bajo entra y se sienta en uno de los tres sillones de cuero.

Ryusui cierra las puertas y se dirige al sillón que está frente a Ukyo. Sólo los separaba una mesita de noche.

— ¿Que quieres Ukyo? — pregunta Ryuisui, no soportaba el silencio incómodo que había entre los dos. El silencio que siempre los acompañaba era cómodo y acogedor, no ese frío silencio que te congelaba hasta la sangre — ¿Deseas terminar? ¿Para así yo poder ser libre y buscar a otras personas? Porque eso fue lo que prácticamente me dijiste.

Ve como su pequeño ángel aprieta los puños y los labios, como si así evitará llorar.

— Lo siento tanto, no pensé que te ofendiera. Es que vi que esos hacían algunas parejas modernas y como eres un alma libre, yo... Yo no sé en qué pensaba.

Ryuisui lo mira serio y le responde — En que no eras suficiente para el gran Ryuisui, que en vez de solo escuchar mi amor por ti comenzaste a escuchar los chisme de la prensa y también el de mi supuesta familia. ¡Por el amor de los dioses Ukyo todos saben que esa familia es una mierda! El único ser bueno de ahí es Sai y ni siquiera está en las empresas familiares.

Ukyo por fin lo mira a los ojos — Se que hice mal, ¿crees que es fácil para mí? Ver como todo el mundo te coquetea y te alaba, esperando que me dejes para ir detrás de una linda chica y por fin tenga al heredero Nanami.

— Podemos adoptar.

Ukyo se ríe y es que siempre le iba a sorprender la manera tan fácil que tenía Ryusui de resolver las cosas.

— Suika no está disponible — dice Ukyo limpiándose las lágrimas.

Ryusui sonríe, se levanta y va donde estaba su novio. Lo toma de la mano y lo levanta acercándolo a él, mientras que coloca una de sus manos en la cintura de su ángel.

— Podemos robarla como todo un buen pirata — le comenta el rubio de mirada rojiza mirándolo a los ojos y acercándose a sus labios.

— Senke y Gen no lo permitiría — le responde Ukyo si dejar de mirarlo a los ojos — Lo siento tanto, lo siento si te ofendí y lo siento por dejarme llevar por comentarios ajenos.

Ryusui no dice nada, solo lo besa porque sabe que las acciones valen más que mil palabras, que sus besos siempre demuestran cuanto lo ama y lo desea con todo su ser.

Lo besaría hasta que en la mente, cuerpo y alma de Ukyo se lo grabar a fuego lento.

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⏰ Última actualización: Nov 10, 2021 ⏰

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