Idiota

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*Narra Alice*

Estábamos en el hospital esperando que nos dijeran como estaba Dakota. La última vez que salió una enfermera nos dijeron que las quemaduras serían muy difíciles de curar.

Sam, Rachell y yo llevábamos ahí como 2 horas esperando buenas noticias, la directora se había ido hace un rato para hablar con nuestros padres, Nash se hecho la culpa de todo para que no nos expulsaran, solo ganamos detención los próximos 3 sábados, genial.

Hayes llegó con Nash después de un rato. Nash aún tenía esa cara de idiota de hace rato, me hacía enojar demasiadio, aunque Dakota no me callera nada bien y la odiara bastante no es para que estuviera feliz de que su piel estuviera destruida.

-Nash- le dije, el volteo- puedo hablar contigo en privado.

-Claro- se levantó de su silla, caminamos por un pasillo de habitaciones hasta que nos alejamos lo suficiente para que los demás no escucharan nada.

-Mira Nash no se que diablos te pasa- le dije- ¿Lo tenias planeado? Eh Nash, querías lastimar.

-Te hizo daño, ok y no me gusto que te lastimaran.- dijo el, después hubo un silencio muy incomodo.

-¿Porque?- le pregunte.

-¿Porque qué, Ali?- dijo.

-¿Porque te importó tanto?

-No lo se- se acercó dramáticamente a mi y puso sus manos en mis mejillas- No lo se.- no sabía que hacer, estaba inmóvil.

Y me besó, sus labios eran diferentes a los de Hayes, pero obvio no dejé que el beso siguiera, puse mis manos en su pecho y lo empuje.

-¿¡Qué te pasa, idiota?!- le grité- soy la novia de tu hermano.- le pegué una cachetada y salí corriendo.

Cuando pasé por la sala de espera donde estaban los chicos escuche como me llamaban, pero no voltee atrás y seguí corriendo.

Llegué a mi auto y lo encendí, conducí sin saber a donde iba. Me había besado con el hermano de mi novio, eso no estaba nada bien. Me sentía culpable aunque fuera la novia culpa de Nash.

No le podía decir a nadie de esto, menos a Hayes, no se si podre vivir con la culpa, ¿y si Nash le cuenta? ¿yo que haría?

Al final me desidí. Matthew. El me iba a ayudar, es mi mejor amigo después de todo.

Iba llorando como loca cuando me llamaron. Era Hayes.

-Hayes no quiero hablar- le dije como pude.

-Alice, Dios ¿que te paso, donde estas?- dijo el preocupado.- hay que hablar. ¿donde te veo?

-Hoy no Hayes, por favor.- susurré yo casi sin poder hablar.

-Esta bien, mañana temprano en la playa. Solo, dime que estas bien por favor.

-Para que mentirte Hayes, no lo estoy.- y colgué.

Le mande un texto a Matthew: "puedo ir a verte, Matt".

Contesto después de un minuto, "si pequeño unicornio, te espero a las 8"

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