Grier Love

Let's Party!

*Narra Matthew*

Nash pasaría por mí a las 9 para ir al club weedmore. Me vestí cool, como siempre y me peine con mi fleco hacia arriba.

Desbloquee mi iphone para ver la hora 8:58, Nash no tardaba en llegar. Justo cuando iba a bloquear mi teléfono me quede absorto en el fondo de pantalla.

Eramos Hayes, Alice y yo después de su "primera cita". Ambos estaban empapados de lluvia y se veían tan felices.

5 meses vi a Alice así de feliz. Para todo sonreía y cuando veía a Hayes se le iluminaba el rostro.

Hoy que la vi no era igual. Sentí como fingió toda esa "felicidad", en ese momento supe que esa no era la verdadera Alice.

No era la Alice que iba a mi patio por las noches solo para hablarme del gran día que tuvo. No era la que hacia reír a Rachel en sus momentos de frustración.

No era esa Alice cuando nos abrazamos esta tarde. Y tampoco lo era cuando me invito al dichoso "lado oscuro".

Mejor dejo de pensar en lo que fue antes para mejor pensar en recuperarla.

Salí de mi habitación y recorrí mi casa de puntitas para que mi madre no note que me fui.

Nash estaba recargado en su auto cuando salí. Llevaba una camisa, unos jeans y un beanie que me recordó al de Alice. También llevaba lentes de sol a pesar de que era de noche.

-¿Lentes?- le pregunte yo- dime por favor que no manejarás con ellos puestos... ¡Oh!

Lo último lo digo porque se quitó los lentes dejando ver su ojo izquierdo morado. Me sorprendí bastante al verlo.

-Hayes- fue lo único que él dijo- ¿vienes o no?.

*Narra Alice*

Todos estaban bailando, pegados a los cuerpos de los demás. El aire olía a alcohol y marihuana.

Vivir la vida loca con Scarlett es definitivamente una de las mejores elecciones que he hecho en los últimos meses.

Todo el tiempo estábamos de fiesta, divirtiendo nos, fumando.

Hoy vinimos al club a conocer a una chica, Brooke creo que era su nombre. Ella es una amiga de Scarlett desde que eran pequeñas.

Conocer gente nueva me ayuda a olvidar a mis viejos amigos. Aunque sin duda extrañaba las estupideces de Matt, las historias de Sam, los regaños de Rachel y las miradas discretas de Jem.

Después de bailar tanto con las cientos de personas que estaban ahí me cansé y me dio una sed terrible, así que fui por un trago al bar.

Caminaba, quitando a las personas de mi camino que bailaban y se besaban en la pista. Suspiré cuando logre salir de ahí.

Al llegar al bar ordene un trago y me senté a esperarlo. Tarareaba la canción que sonaba en todo el lugar.

De pronto, sentí a alguien sentarse a mi lado. Voltee para ver a la persona, era un chico, se veía un poco mayor que yo.

Llevaba unos lentes de sol por raro que suene, y un beanie que solo dejaba ver parte de su cabello.

-¿Les compro un sol a tus lentes?- le pregunte al chico misterioso.

-No, gracias- dijo el educado. Yo sonreí de medio lado y tome de la bebida que ordene.

El también ordeno una y unos segundos después llegó. Hubo un incomodo silencio, sin contar la música y el ruido de la multitud.

-Me gusta tu beanie- le dije para romper el silencio.

-Lo se- dijo el indiferente, yo voltee a verlo extrañada.- es que tu lo escogiste.