Era otro día más, Liam se encontraba preparando los pasteles del día.
— Buenos días, Liam, — sonrió el rizado de ojos verdes. Harry trabajaba tres días a la semana con él y Louis en la cafetería, el chico estaba ahorrando para su colegiatura de la Universidad, también había llegado a Londres desde Holmes Chapel, para lograr su sueño, que implicaba convertirse en un reconocido diseñador gráfico. Harry era un chico amable y educado, aunque demasiado tímido.
— Hola Hazz,— sonrió el castaño,— ¿Cómo estás?
— Bien, Li, ¿Y tú?— preguntó amablemente.
— Ven, tengo mucho que contarte, — después de eso Liam comenzó a relatarle sobre la visita de su príncipe pelinegro.
— Ow, estoy seguro de que lo volverás a ver, — dijo el ojiverde, — iré a limpiar la vitrina, — anunció el chico.
Cuando Harry salió, el castaño se quedó inmerso en su recuerdo del día anterior, tan perdido estaba que comenzó a mezclar la harina sin siquiera tamizarla como se requería.
Después entro Louis, que había ido a comprar algunos ingredientes que necesitaban.
—¡Liam! — gritó luego de que el castaño ignorara su saludo inicial, —Date prisa, abrimos en sus horas.
— Oh, ya voy— Liam se sonrojó y se apresuró a revolver la mezcla para depositarla en el molde. Comprobando la hora se apresuró para los demás postres.
Alrededor de las nueve de la mañana todo estaba listo, el lugar estaba perfectamente acomodado y limpio, Harry ya había encendido la cafetera y Louis ya tenía todo listo para los batidos que a veces les pedían, el castaño colocó el último de sus pasteles y con una sonrisa se dispuso a esperar a sus clientes.
El pastel que había consumido el día anterior era asombroso, probablemente de ahora en adelante sería su pastel favorito, él pelinegro se preguntaba si todos los pasteles sabían igual de deliciosos. Decidido a comprobarlo decidió pasar por la cafetería, Dulce delicia, una vez más.
— Y aquí viene nuestro primer cliente,— dijó Louis dándole un codazo al castaño, que se sonrojó al ver de quién se trataba.
El pelinegro portaba un traje beige, Liam no pudo evitar mirarlo mientras el chico parecia examinar los pasteles.
— Buenos días— dijó por fin. — Me gustaría una rebanada de este, — dijó señalando el pastel de moras — y una taza de té, por favor.
— E-en seguida se lo llevo, — sonrió Liam un poco nervioso. El chico asintió y fue a sentarse a la misma mesa del día anterior.
— El debe amar tu pastel, — dijó Louis, sonriendo.
— Oh, ¿Tú crees?— preguntó el castaño animado, mientras nuevamente cortaba una gran rebanada.
— Llévale eso a tu príncipe, — dijó Louis, — ahora hablamos.
Cuando Liam fue a dejar la orden de Zayn, el chico nisiquiera le dirigió la mirada, parecia bastante concentrado en su teléfono, el castaño volvió a su lugar.
El ojiazul que lo conocía como la palma de su mano, lo encontró con el ceño fruncido, y decidió preguntar.
— ¿Qué está mal Li?
Liam pensó en negar, pero sabía que Louis no lo dejaría pasar. — Yo planeaba iniciar una conversación ahí, pero él nisiquiera me miró.
— ¡Ya sé!— exclamó el ojiazul. — Se me ocurre que puedes grabar tu videoclip ahora, — sugirió, — y justo en la mesa junto a la de tú príncipe tenemos el ángulo perfecto.
—¡Es una excelente idea!— dijo Liam animado, — así él me notará.
— Bueno, entonces vamos, — dijo el ojiazul tomando su teléfono, él castaño eligió otra rebanada del mismo pastel que había pedido el pelinegro y después se dirigió a la mesa que había propuesto Louis.
—Hola a todos, — hablo Liam hacía la cámara, — el día de hoy les quiero recomendar esté pastel, — dijó mostrando su rebanada, —es un pastel de moras, y está realmente delicioso, visítenos en la cafetería ¡Dulce Delicia! — finalizó con una hermosa sonrisa.
— Bien hecho Li, — dijo el ojiazul alejándose. — Estaré en la cocina.
En cuanto empezaron a grabar el videoclip, el pelinegro los miró con el ceño fruncido, cuando él ojiazul se alejó, este se acercó al chico que hacía la recomendación del pastel.
—¿Sabes? Deberías probarlo antes de recomendarlo, — dijó en tono serio.
— ¿Qué dices?— preguntó el castaño casi hiperventilando por el hecho de que su príncipe hablara con él.
— Eso, lo que oyes, — dijó Zayn nuevamente, — este pastel no está lo suficiente esponjoso, sabe mal, pero bueno no te culpo, probablemente solo eres el mesero.
— ¡¿Qué te pasa?! — exclamó el castaño ofendido— para tu información yo soy el chef, y mis pasteles no saben mal, mucha gente nos recomienda.
— ¿Ah sí?, pues lo dudo, este es probablemente el pastel más horrible que he probado en la vida, — dijó el pelinegro— y te advierto que si tengo dolor de estómago no dudaré en demandarte. Me extraña que nadie se haya quejado ya.
— ¡¿Qué estás diciendo!?— exclamó Liam con una expresión enojada, — ¡Nunca vendería un pastel con mal sabor! ¡La gente ama mis pasteles! A diario mi cafetería se llena.
— Oh, tal vez no son los pasteles lo que les atrae de este lugar,— dijó el pelinegro algo burlón, había echado un vistazo con más detenimiento, y tenía que reconocer que el chico frente a él era apuesto.
El castaño tardo en procesar sus palabras, cuando el pelinegro ya se estaba marchando. — Recuérdalo, si tengo el mínimo dolor de estómago, me asegúrare de que esté lugar cierre— dijó intimidante.
— ¿Que está pasando?— preguntó Louis, pero el pelinegro ya se había marchado.
— ¡Él insulto mis pasteles!— chilló el castaño, — ¡no puedo creer que él se haya atrevido!
— ¿Qué?— Louis tomó la rebanada, — esto se ve bien, ¡Qué diablos le pasa!
Cuando Louis miró, algunas lágrimas amenazaban con salir del rostro del castaño. — Oh, no dulce, ven aquí— lo tomó en un abrazo.
Cuando logró calmarlo le indicó, — ¿Porqué no vas a la cocina? Harry y yo nos encargaremos de los clientes en lo que te calmas.
— ¿Harry?— llamó Liam mientras se dirigía a la cocina, — ¿Puedes deshacerte del pastel de moras?
— ¡Oye no! La comida no se desper... — el ojiazul estaba por protestar pero mirando a Liam conteniendo las lágrimas, dejó el asunto.
— No te preocupes, — dijó Harry, — lo ocultare y me lo llevaré a casa al final del día, mis compañeros de piso estarán encantados. No puede estar tal mal.
¿Qué les pareció el capítulo?
Mil gracias a los que han decidido darle una oportunidad a esto ❤️
