-Liam, ¿me podrías explicar que está pasando con tu cafetería? - preguntó Yaser Malik con un tono serio. Liam fué citado para aclarar el asunto de su cafetería, y estába muy nervioso al hablar con Yasser Malik, el hombre lo miraba un poco decepcionado.
- Señor Malik, yo... sinceramente no lo sé, - confesó el castaño, - se lo juró que ni yo mismo me explico porque mis pasteles de pronto saben tan mal. Usted mismo sabe que esto no era así, mis pasteles eran los mejores de la zona.
- ¿Acaso no tienes cuidado Liam?- preguntó Yaser nuevamente. - ¿Qué me puedes decir de los productos? ¿Acaso estás comprando todo de baja calidad? Quizás estás tratando de ahorrarte un poco más, pero si lo sigues haciendo tu negocio no sobrevivirá.
- Yo le juro que compro todo de la mejor calidad, - insistió Liam, - se lo juró Señor Malik, yo...
- Mira muchacho, tu negocio parecia ser lo bastante bueno, y no entiendo porque todo ha ido mal últimamente, al principio demostraste ser un chico responsable y es por ello que te voy a dar una oportunidad, - dijo el hombre moreno, - tienes mes y medio para recuperar a tus clientes, ¿De acuerdo? Si no lo logras, lo lamento pero tendrás que desocupar tu local, entiende que la reputación de este centro comercial está en juego.
El castaño tenía la mirada baja estaba muy avergonzado con la situación, se limitó a dar un débil,
- Sí.
- Entonces te veré pronto Liam, - dijo Yasser.
- Gracias por la oportunidad, hasta pronto señor Malik, - dijó el castaño antes de salir de la oficina.
Después de contarle todo lo ocurrido a Louis, envío al ojiazul a comprar nuevos ingredientes y decidió comenzar a buscar nuevas recetas, quizá con pastelillos novedosos podrían recuperar a sus clientes, no podía dejar que su cafetería cerrará. Un tanto disgustado por los recientes eventos comenzó a revolver con furia la mezcla de los pasteles, estaba perdido en sus pensamientos cuando una voz lo interrumpió.
- Disculpa-
Todavía sosteniendo un cucharón se giró para enfrentar al intruso, se sorprendió al ver de quién se trataba.
- ¡¿Porqué estás aquí?!- preguntó exaltado-. Aquí no pueden entrar los clientes, - dijó el castaño a la defensiva.
- Tengo una muy buena razón para estar aquí, - dijó el pelinegro.
- No lo creo, - dijó Liam, - es mejor que salgas de aquí ahora mismo- trató de hacer que saliera, afortunadamente Louis llegó en ese momento.
- ¿Qué está pasando aquí?- preguntó.
Zayn se aclaró la garganta. - Fuí asignado para inspeccionar tu lugar, estaré vigilando está cafetería durante todo el mes, - Yasser le había pedido que se encargará de supervisar el lugar, al principio el pelinegro había querido negarse pero sabía que no era una petición sino una orden, su padre sabía diferenciar completamente su relación laboral y personal.
Louis y Liam se miraron sorprendidos, el castaño no sabía que Zayn era hijo del señor Malik, pero tenía conocimiento de que era el subgerente.
- ¿Y porqué te asignarían a ti?, - preguntó aún exaltado. - ¿Siquiera sabes algo de cocina?
Estoy seguro que jamás has preparado nada, ¿Acaso no tienes algo más importante que hacer con las finanzas o algo así?- no se detuvo a pensar antes de soltar todas ésas preguntas, está vez la sonrisa burlona no estaba en el rostro del pelinegro, este simplemente lo miraba serio.
- Liam, tranquilizate,- pidió Louis suavemente.
El castaño miró todo el desastre que había en su mesa y suspiró frustrado. - Lo lamento, - comenzó a ordenar las cosas que Louis había traído, - no puedo preparar nada, de todas formas no creo que hoy vengan clientes, - caminó hacía las mesas.
