Navidad

1.3K 171 187
                                        


Por algun motivo se habia dado a la tarea de hacer algo descente para sus visitas; generalmente no se dignaba a hacer algo pues solo Oboro entraba a su casa y casi siempre terminaban pidiendo a domicilio y rara vez comian algo preparado en casa a menos de que su madre  estuviera o cuando no tenian dinero suficiente para eso.

Sin embargo en esta ocasion quiso hacer la receta especial de tarta de fresas de su madre en compañia de su hermanito pequeño, quien tenia puesto un kimono violeta con lineas rectas que alguna vez le pertenecio y no tenia precisamente buenos recuerdos con esa cosa.

-Yo pongo las fresas de arriba.

-Lo se, no te preocupes, las otras sietes veces anteriores me lo dejaron en claro....

-Me vas a dar un pedacito?

-Por supuesto.

Admite con una tranquila sonrisa mientras humedece el bizcocho con el alnibar previamente preparado, mientras su hermanito cantaba una cancion infantil mientras movia sus piecitos en sincronia hasta que  hablo con aquella brutal sinceridad que siempre le caracterizaba.

-Haz sonreido mucho mas ultimamente....

-Tu crees?

-Si, a veces, me pone triste ver tus ojitos tristes....Me emociona cuando estas mas feliz!

-Oh....

Esas palabras le hicieron ver lo que habia temido bastante y que sin embargo no le habia puesto precisamente mucha atencion debido a sus constantes depresiones.

Hitoshi era muchisimo mas consiente de su propio entorno de lo que el estaba empeñado en creer; ese chiquillo intuia, mas bien sabia que su familia estaba pasando por un momento complicadisimo y sin embargo era lo suficientemente inocente e ignorante como para saber al 100% que pasaba realmente.

Rapidamente se apresuro a sonreir de lado a lado despeinando el cabello del niño logrando levantarlo un poco dejando al descubierto sus preciosos ojos rosados, algo comun para el ojigris pero algo clave para el chiquillo que seria su tipo de peinado por el resto de su vida.

-No estoy triste, solo estoy estresado ves?

Susurra señalando su boca sonriendo de lado a lado de aquella forma particular haciendo al mas bajo saltar haciendo un sonido divertido por las diminutas getas que tenia puestas.

Al momento de adornar el niño se empeño en hacer una carita sonriente al pastel, y cuando el se dispuso a cortarlo para darle una porcion el niño se apresuro a decir que por ningun motivo debia arruinar la carita en su prescencia asi que tuvo que hacer un corte todo raro para poder cumplir el capricho del ojirosa.

Su madre esta vez llevaria al menor con la mama de Kaminari, asi que se apresuro a tomar su extraña sudadera a la cual le habia tomado bastante amor por el beso con Yamada, aunque recordarlo le dejaba una boba expresion en el rostro; al salir de su casa pudo ver a Sushi en el techo el cual solo le asintio a modo de permitiva para que se fuera, rapidamente corrio por las calles sumamente transitadas de las plazas principales.

Viendo a familias amorosas y grupos enormes de amigos los cuales llevaban regalos y bolsas con sus tipicas prendas abrigadoras para esas fechas que todos tanto amaban.

Por unos segundos entendio por que a todos sus compañeros de salon les encantaba esta fecha tan especial e increible; tan magica y unica, por primera vez se sentia como adolescente normal y no como alguien raro.

Al llegar a la entrada de la plaza se topo con ese par frente a la puerta sosteniendo una camara, una lampara y un letrero, lentamente fue acercandose a ellos hasta que Kayama le noto y le sonrio animada corriendo a darle un cartel.

Six Station [Erasermic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora