Regrese pt.2

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Estaba sola y perdida en esos blancos pasillos que me aterraban, por suerte joselo me encontró.

- aquí estás, te estuve buscando- antes que dijera algo más lo abracé-¿qué pasa?
- Llévame a casa, por favor- mi cara estaba roja y mis ojos llenos de lagrimas
- ¿Qué pasa?- repitió
- Crees que no lo sabría
- De que hablas?
- No hace falta que me ocultes nada
- Se trata de Angelo?
- Siempre se trata de Angelo
- Y qué quieres hacer?
- Irme a casa, quemar la oficina de Edgardo
- Solo empeorarás todo
- Entonces le diré a Robert que me acompañe, y no te preocupes tengo unas llaves de la camioneta
- T/n ven aquí- gritó pero yo solo corrí sin darme la vuelta

Corrí por unos largos pasillos hasta que por fin vi a mi pequeño novio sentado en las sillas de la cafetería.

- Rob- grite
- Donde estabas? Estaba muy preocupado- me abrazó
- Ricky está aqui- dije viéndolo a los ojos
- Que?Que hace aqui?
- El vino a verme, quería asegurarse de que yo estuviera bien.
- Le encanta jugar al héroe- dijo celoso
- Rob...
- No lo niegues, siempre aparece para ayudarte.
- Sabes cómo es Ricky
- Le haré saber que yo estoy para cuidarte ahora y que...- no lo deje hablar y solo lo besé - o pensándolo bien podría besarte- dijo y siguió con otro largo beso.
- Te ves adorable celoso Roberto
- Uno, no estoy celoso y dos, no me llames Roberto.
- Lo siento, pero si estás celoso

En ese mismo instante que estábamos hablando la cara de Robert cambio, y alguien tocó mi hombro.

- no solo vine a ver si eras tú.
- Ricky
- Feliz cumpleaños a mi persona favorita- dijo y me dio una pequeña cajita
Con todo el desastre había olvidado por completo que cumplía 17 años.
- que es esto Ricky?
- Es algo que tengo guardado desde hace años.
- Todavía los conservas- mis ojos se cristalizaron, eran los anillos que Ricky me había dado cuando terminamos, el mismo que se me había caído.
- No busco que volvamos, estos anillos representan una alianza, una unión, y quiero que tú la tengas.
- Gracias- lo abracé. Robert ya estaba rojo de los celos, y Ricky no sabía que salíamos
- Ricky, Robert y yo estamos saliendo.- Robert sonrió
- Sabia que tenías algo más que un odio hacia ella- sonrió Ricky- pero ahora si me disculpan tengo un vuelo que tomar.
- Te irás tan pronto?
- Solo necesitaba saber que estabas bien- me abrazo- adiós t/n, New York tiene las puertas abiertas para cuando puedas salir de aquí.
- Lo tendré en cuenta.

mamá quiero ser menudoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora