EL INICIO CAP.1

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Tras la muerte de sus padres Elizabeth con solo cinco años va a vivir con el único familiar vivo que le queda.

Su abuela, que vivía en una cabaña situada en la linde de un tétrico bosque.

Dos años después

Elizabeth se encontraba jugando con un cachorro de lobo negro como la noche bajo la antenta mirada de un curioso cachorro de lobo blanco como la nieve. A pesar de los años Elizabeth nunca consiguió hacer amistad con el pequeño.

Mientras tanto, su abuela se encontraba discutiendo con el cazador.

-¡Cuantas veces te he dicho que me dejes en paz, no se nada!-Gritó la abuela.

-¡Deja de negarlo, se que sabes algo! así que la próxima vez que vuelva mas vale que me digas la verdad o atente a las consecuencias- dijo de forma intimidante el cazador.

-Tu no puedes hacerme nada- dijo con voz sarcástica la abuelita- si vienes será en vano, yo nunca abriré mi puerta a personas como tu.

Después de esas palabras la abuelita se fué sin dar tiempo de responder al cazador

-De esta no sales anciana- susurró para si mismo el cazador.

Y con eso el cazador se fue de nuevo al pueblo.

Al llegar a casa Elizabeth esperaba pacientemente la llegada de su abuelita, ya que después de un rato los cachorros se fueron al ser llamados por su padre.

-Después de comer quiero que vayas al pueblo a comprar pan y huevos, ya casi no nos queda- la abuelita únicamente la mandaba al pueblo a comprar cuando tenía que hablar con Dominic Grimm, alfa y mejor amigo de la abuelita-si te sobra dinero comprate algún dulce y luego vienes a casa, pero no te entretengas mucho.-

-Esta bien abuelita- respondió animadamente Elizabeth- prometo no tardar mucho.

Cuando acabaron de comer, Elizabeth cogió el dinero y se fue alegremente al pueblo pensando que dulces compraría esta vez en la tienda, ya que sabía que su abuelita siempre la daba dinero de mas para comprarse los dulces que tanto ansiaba Elizabeth.

Cuando la abuelita perdió de vista a Elizabeth se encaminó a paso rápido hacia el interior del bosque. Ella se lo sabía de memoria y por lo tanto donde hayar a la manada de Dominic.

Después de unos cuantos minutos andando, la abuelita divisó la antigua pero hermosa casa de madera cuando, de repente, cuatro enormes lobos se aproximaron a ella y al reconocerla, un lobo color canela con las puntas de la cola negra aullo para avisar al alfa de la presencia de la abuelita.

Apenas el lobo color canela finalizaba su aullido otro lobo de color grisáceo mucho mas grande que los primeros salió de entre los arbustos. Al situarse alado de la abuelita este soltó un gruñido de forma amistosa a los demás lobos y al instante estos se retiraron por el mismo sitio del que habían salido

-Necesito hablar contigo en mi casa, a ser posible ahora mismo- dijo seriamente la abuelita.

El lobo simplemente agachó la cabeza aceptando la petición de la abuelita. Cuando esta comenzó a andar el lobo se puso a su lado y fueron a casa de la abuelita sin decirse nada, simplemente disfrutando de los sonidos del bosque.

Al llegar a casa , la abuelita le tendió ropa al lobo, ella sabía que al transformarse otra vez en humano el se encontraría de la misma manera que vino al mundo y la abuelita no quería pasar por eso, otra vez.

Después de un rato Dominic apareció vestido con la ropa que le dio la abuelita.

Dominc es un muchacho 39 años. Tiene unos músculos muy trabajados. Sus rasgos de la cara no estaban muy marcados, pero lo que mas llama la atención en el, es su enorme cicatriz que llega desde su ceja izquierda pasando por su ojo y acabando casi a la altura de sus labios. La abuelita sabía que no era su única cicatriz pero nunca quiso preguntarle ya que se hacia una idea de lo que le había pasado.

Red hairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora