Memorias de un Adolescente©

Capítulo 48. Traición

— ¿Como que mamá y los demás no estan? —dijo alterado Chris.

— Ya te dije, cuando veníamos para acá nos persiguieron cuatros camionetas negras, polarizadas y blindadas. Nos acorralaron hasta que nos sacaron de la carretera a la fuerza. Lo último que recuerdo fue que estábamos dando vueltas y todos asustados.

— ¿Y papá?

— No se, el no venia con nosotros, dijo que arreglaría las cosas, supongo que no contemplamos las consecuencias que tendría venir aquí.

— Hay que reportarlo —opino mi hermano.

— No —dicto Deer—, esto sería carne fresca para la prensa y destrozarian más a la familia. Contratar matones para que vayan a por ellos y paguen.

Esteban y yo nos miramos.

— Disculpa, ¿matones? —pregunte—, ¿eso no seria peor?. Digo podrían lastimar a la familia y eso es lo que no queremos.

— ¿Y a ti quién te involucró? —pregunto molesto.

— Desde que salgo con tu hermoso hermano estoy involucrado, te guste o no.

— Como digas principito, ¿cual seria tu grandioso plan?.

— Buscar al infiltrado —dije y todos me miraron raro—. Desde hace un tiempo me he dado cuenta que pasan cosas inusuales. Luces raras como aquella vez que nos dispararon o lo que pasó en la escuela. Hay alguien de cerca que nos vigila.

— ¿Crees que eso es posible? —pregunto Esteban—, digo es algo absurdo.

— Algo —dijo Deer—, es una estupidez. Mejor mantente callado niño.

— ¡Deer basta!, justin es mi novio respetalo como tal.

— Como sea —dijo con mala actitud colmando mi paciencia.

— ¡Es suficiente! —exclame—, tu pedazo de mierda —dije mirándo a Deer—, o cambias tu puta actitud de mierda o te me largas de aquí que hijos de puta como tu no quiero en mi casa —dije abriendo la puerta y este me miro desconcertado.

Chris intentó intervenir pero al ver mi enojo se detuvo.

— Vas a dejar que me habla así —dijo mirando a Chris.

— Hermano tu te lo has buscado, controla tu actitud y te puedes quedar.

Deer solo bufo.

— Bien, me controlare.

— Piensen debe ser alguien que tiene cercanía a la familia —Opino Esteban.

— Dios si principito es torpe su hermano lo es más por decir lo obvio.

— Deer —regaño Chris.

— Vale perdón, es que no lo puedo evitar.

— Chicos será mejor que vayan a la escuela ya se les está haciendo tarde y ustedes tienen exámenes —recordó Esteban a lo que reaccioné con sorpresa.

— Carajo es cierto —dije—, Chris vamos. ¿Esteban nos llevas?

— Claro vámonos.

— Deer esperanos aquí —indicó mi chico—, nosotros no tardamos solo vamos a la escuela.

— Esta bien, descansaré en ese tiempo.

Estaban nos llevó a la escuela, nos dijo que nos cuidaramos y después se fue junto con Liam.

Cuando entramos nos topamos con nuestros amigos.

— ¿Chicos dónde se habían metido? —preguntó Jessica.