Capítulo 33. Grata sorpresa

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Junto a Chris caminamos a la sala de estar donde estaban nuestros amigos. Yo tenía a Liam en brazos. Y Chris estaba a mi lado.

— Bueno familia —habló Chris llamando la atención de todos. Yo me percaté de quienes estaban y en efecto, estaban Jessica, Verónica, Theo, Raziel. Los tíos y primos de Chris y mi hermano y su novia—, Queremos presentarles a Liam.

Todos se emocionaron y se acercaron. Mi reacción no fue algo amigable ya que me alejé un poco. Los quiero a todos y confío en ellos pero estamos hablando de mi hijo y ahora el es prioridad.

Mi prioridad es tenerlo a salvo.

— Vaya parece que alguien es un padre sobreprotector —comentó Noah a qué recibió un regaño de parte de sus padres.

— Perdóname —dije apenado—, esto es nuevo para mí. Quiero que conozcan a mi hijo pero vayan más despacio. No tan rápido si. Por favor —les pedí y todos asintieron.

La tía de Chris. Adriana. Se acercó de primero. Así que me acerqué también a ella para que pudiera conocer al bebé.

— Oh Justin es tan hermoso, felicidades tesoro —Ella le sonrió a Liam y yo sin querer sonreí también.

Así estuvimos en presentación en presentación hasta que mi mejor amiga se acercó.

— Loco me ganaste, yo quería ser mamá primero —comentó abrazarme cuidadosamente—, te odió —dijo en broma. A lo que me reí por sus ocurrencias.

— Ay Jess ni te imaginas —dije sincero intentando darle una señal de que necesito hablar con ella.

Ella medio entendió y me susurró al oído.

— Hablaré con Chris para que te ayude con Liam. Así podremos hablar mejor —yo asentí y ella de separó de mí.

Y como si todo estuviera escrito Chris apareció.

— ¿Justin puedo cargarlo? —Me pareció tierna su pregunta. El es el único a demás de mí quién puede tener a mi hijo en brazos.

— Claro amor. Puedes cargarlo —el se acercó y con sumó cuidado deje a Liam en brazos de mi amado Chris.

De forma inmediata sentí mis brazos algo entumecidos. Pero no lo había sentido por la emoción del momento.
Iré por algo de tomar le informé a Chris pero me ignoró debido a mi pequeño retoño.

Así que me alejé y caminé hacía la cocina. Al entrar me quedé sorprendido por la escena que vi. No me pareció extraño más bien tenía mis sospechas que estos dos andaban.

Vi como Raziel se comía a mi mejor amigo y ellos nos en cuenta que yo estaba ahí. Carraspeó y de forma inmediata Theo y Raziel se separaron. Ambos estaban nerviosos y sorprendidos porque los descubriera. Pero realmente me hace feliz que mi mejor amigo tenga pareja.

— Oigan chicos relájense, estoy feliz por ustedes —seguí caminando hasta llegar al refri. Saqué una botella de agua fría y la bebí. Pero noté que Theo seguía algo apenado por qué los descubriera en la cocina besándose—, ¿no dirán algo? —pregunté ya que ambos estaban callados y muy juntos—, ¿quieren algo de tomar? —les propuse.

— Una gaseosa estaría bien. Gracias  —dijo Raziel.

Yo asentí y saqué una gaseosa de cola de la refri. Se la pasé a Raziel y la recibió con una leve sonrisa.

Realmente no conocía muy bien a Raziel, solo las pocas veces que nos veíamos en hora de receso o cuando lo veía por los pasillos de la escuela. La mayor parte del tiempo siempre estaba con Theo. Me molestó un poco ya que pensé quería arrebatarme a mi mejor amigo. Pero lo que realmente paso fue que ellos empezaron a salir. La pregunta es, ¿cuando sucedió todo esto?, pero de seguro no me he enterado de muchas cosas.

Memorias de un Adolescente©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora