La luna.

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Estoy en una sala enorme, las ventanas abarcan toda la pared de enfrente y por ellas solo se ven árboles.
Tengo una copa de vino tinto (es el mejor que e probado en toda mi vida) sentada en un sillón enorme, podrían dormir 4 personas en el si quisieran.

Suga está sentando justo al lado de mi observando a un punto fijo fuera de la casa aunque por más que intento descifrar que es yo no logro ver nada.
- A: y bien?
- S: ah claro, te iba contar - de gira un poco para quedar de frente a mi - esto pasó el año pasado.
- Estoy lista para escucharte.

Su voz era tan suave que parecía que estaba escuchando un audio libro.

- S: ella era muy reservada, aunque hacía impecable su trabajo siempre se mantuvo callada
y distante con todos los demás.
Me enteré por uno CEO que ella y Jk se vein a escondidas.
Las cosas empezaron a tornarse raras cuando ella se veía constantemente llorando por los pasillos. Jk nos dijo que decidió terminar con ella porque se mostraba muy posesiva con el y tú sabes cómo es el - me mira a los ojos - es como querer deter que el sol brille - sus palabras me recordaron a la plática que tuve hoy con el chofer y se encogió un poco mi corazón, estaba frente a la luna y si compañía me hacía sentir una extraña calma - ella empezó a buscar consuelo conmigo por alguna razón y después de algunos días se habló de despedirla pues sencillamente no se controlaba cuando estaba en su horario. 
Un día llego a mi oficina a pedirme consejos pues sabía que estaba cerca de que eso pasara, ella lloro en mi oficina y me pidió llevarla a su casa.
Acepte y al llegar ahí me sorprendí, la casa en la que me pidió estacionarme era más grande que la mía -hizo señas con sus manos para dejar en claro lo grande que era, esta acción me hizo reír un poco y a él también - en fin, me dijo que si quería pasar por una copa y la curiosidad me atrajo a ella.

No te platicaré lo qué pasó al entrar a su cuarto pues a pesar de lo que dijo es su integridad la que está en juego, pero no creo que te lo puedas imaginar. Desperté al día siguiente con un dolor de cabeza horrible y ella había desaparecido.
Salí de ahí sin entender qué pasó, llegue a la oficina pues tenía una junta importante. Entonces estaba ella ahí, en los brazos de Jk.
Entramos a una oficina y ella empezó a explicar cómo yo la emborraché y me aproveche de ella. Todos me miraron y por alguna razón le creyeron.
Jk estaba furioso y me ocasionó una gran discusión con el, todo fue creciendo y la historia que contaba era tan creíble que hasta yo dudé si las cosas habían pasado así. Solo ella y yo sabemos bien lo qué pasó en esa habitación y la verdad es que no e querido decirlo jamás.
Entonces me demando y tuve que pagar una gran cantidad porque ella no dijera nada a los demás ni a los medios.
El juez me prohibió estar a menos de 100 metros de ella y la decisión de que se fuera de la empresa no tenía cabida para ser revocada.
Pedi yo mismo entregar su carta de despido y ella se fue victoriosa del lugar. Después de eso ella compró la cabaña al lado de la nuestra y al parecer no puedo estar ahí.
- A: pero qué pasó en ese cuarto?
- S: no puedo decirte - miro de nuevo la ventana - pero espero jamás volver a pasar por algo igual.
- A: esta bien, ahora entiendo un poco más.
- S: el problema aquí es que ella sigue muy enamorada de Jk.
- A: y ahí interfiero yo? - sirvo lo que queda de la botella en mi copa (me la termine toda yo?)
- S: así es... supongo que fue lo que tuvo que ver Jk por la tarde y no se cómo pero se enteró que estábamos ahí.
- A: entiendo... pues será mejor que no sepa de mi - mis palabras ya suena atropelladas y se que me excedí.
- S: ya lo sabe, ella siempre sabe todo.
Nos quedamos en silencio, la compañía de Suga me tiene en paz, me encantan los momentos en los que no decimos nada y aún así me siento acompañada. Se que es tarde pero no soy consciente del tiempo,  mire el reloj en la pared negra a mis espaldas; Eran casi las 3 de la mañana y estaba cayendo rendida ante mi sueño.
- S: ven, te llevare a tu habitación.
- A: Gracias.
Caminamos en silencio, ahora que estoy en movimiento puedo notar que tomé demás, mis pasos se ven desorientados y Suga me sostiene a medio camino para llevarme por la cintura.
- S: aquí es.
- A: Gracias... podrías ayudarme a quitarme mis botas?
- S: claro.
Se agacha y empieza a desatar mis agujetas, esta estirando una de ellas y to resbalo de la cama calle di los dos al suelo, estamos riendo sin control, el se siente frente a mi y el aire se llena de tensión. Puedo sentir como mi cara se acerca a él como su de un iman se tratará, lo tomo por el cuello y estoy convencida de lo que haré ahora.
- S: no puedo hacerlo -siendo como se retira de mi, quita mis manos y se levanta - no quiero.
- A: no quieres? - me levanto y quedo justo frente a él.
Nos quedamos en silencio un momento y decido que quiero hacerlo aunque no sea lo correcto, estoy segura esta vez que quiero hacerlo.
Lo tomo por el cuello y lo beso, el simplemente me lo devuelve y da un paso atrás.
- S: si lo hago no podré detenerme.
- A: no quiero que lo hagas.
- S: no quiero que sea así, tú tomada - me mira a los ojos - y con el.
- A: qué no estoy con el - digo tan alto que se asemeja más a un grito.
- Jk: con quien? - escucho desde el pasillo y mi sangre parece irse a mis pies.
- S: con el hermoso estado de ebriedad, será mejor que la acuestes a dormir ya, estoy discutiendo con ella que no puedo - me mira a los ojos - darle otra botella.
- Jk: gracias, yo la cuidare ahora, puedes dormir donde gustes. - lo toma del hombro y el peso de lo que lo que estaba a punto de hacer me llega al corazón. Que está pasando conmigo? - Gracias de verdad
Suga se va en silencio, siento un vacío dentro mi y  me recuesto en la cama, el se acerca a mi lado y nos cobija a los dos.
- Jk: tranquila, ya estoy aquí.
Su olor inunda mi nariz y unas repentinas ganas de llorar me atormentan. Mis lágrimas caen pero se que el no las podrá ver.
¿Porque quiero que este Suga en su lugar?.

Quiero que seas tú. Suga o Jk.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora