Strange | Vhope

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El resto el día estuvo relativamente normal. Bueno, si normal me refería a tener los atentos ojos de Jisung siguiendome cada vez que respiraba. Estaba muy consciente de que pronto se descubriría la verdad pero ¿Porqué seguía allí después de todo? Jisung podía ser mi boleto hacia "la libertad" pero... Siempre había un pero, una razón la cuál tenía muy enterrada y constantemente daba punzadas en mi interior. Afuera no me esperaba nadie más que Yoongi, pero aquí tenía... A Taehyung y a Jeongin ¿Podría ser tan egoísta como para mantenerme aquí a pesar de que la persona que me quiere está allá afuera? Ni siquiera tenía una respuesta para ello.

Por semanas había estado atrasando esos pensamientos desde aquella llamada tratando de autoconvencerme que solo me quedaba allí para recuperarme, pero luego me descubría a mi mismo pensando en qué le daría a Jeongin para su próximo cumpleaños, en organizar una cita de juegos para que socialice más, en que tal vez debería probar hacer un estofado de kimchi con carne de cerdo o de caballa picante para la cena para tratar de alardearle a Taehyung... Ni siquiera recordaba como era preocuparme por un próximo exámen o en que debería trabajar turno doble los fines de semana para poder alcanzar a fin de mes. Y eso me asustaba. Esto no me pertenecía, por más acostumbrado que estuviera, esta fue la familia de otra persona.

-Hey, Kookencio -La voz de Jisung me atrajo abruptamente a la realidad -¿Agarrarás raíz de loto o no? Creí que habías dejado de tomar pastillitas.

-Ohh sí, lo siento -Rápidamente dejé los palillos a un lado haciendo caso omiso a las palabras del omega. Al parecer me había quedado con los palillos suspendidos sobre el plato durante el suficiente tiempo como para llamar la atención también de Taehyung y Jeongin.

-Yo, olvidé... Regar a Yeontan, disfruten su comida -Carraspateé incómodo levantándome de la mesa pasando las manos nerviosamente por mis brazos.

Ni siquiera supe que había soltado cuando me alejé casi corriendo del comedor terminando de alguna manera sentando en una de las tumbonas a un lado de la piscina. El cielo estaba oscuro y el viento helado me ponía la piel de gallina. La única luz provenía del interior de la casa y algunas estrellas del cielo, estaba bastante despejado considerando que estábamos a mediados de otoño.

Luego de varios minutos de divagaciones en los que me terminé acomodando casi en posición fetal sobre la tumbona, finalmente consideré volver adentro. Hasta que escuché unos pasos aproximarse y un aroma bastante familiar golpearme la nariz.

-¿Estás bien? -No pude evitar observar de reojo al alfa, el cuál se había sentado casi de la misma manera en la tumbona al lado de la mía.

-Sí ¿Porqué lo preguntas? De verdad necesitaba... Regar a Yeontan -Devolví la vista a mis pies sintiendo el calor subir a mis mejillas al ser consciente de mi patética excusa.

-Graciosito -Pude ver un atisbo de sonrisa en su rostro -Sé que probablemente te incómoda Jisung, y no te lo tomes muy personal, está muy borde porque recientemente su novio le pidió que se dieran un tiempo por que no sabía el nombre de sus gatos a pesar de tres años de relación -No pude evitar soltar una breve risa, siendo acompañado por él segundos después.

-Está bien, realmente comprendo el comportamiento de Jisung hacia mí, también el tuyo y el de Jeongin -Respondí tratando de verme indiferente cosa que al parecer no logré con mucha convicción.

-Yo... -Taehyung abrió y cerró la boca simultáneamente, parecía preparado para decir algo hasta que empezó a toser y su rostro adquirió un tono rojo.

-¿¡Te encuentras bien?! -Rápidamente me acerqué alarmado hacia él quedando sentado en su tumbona frente a frente, trataba de encontrar la causa de su reacción.