Capítulo 1: No Todas Las Historias Tienen Finales Feliz

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Narrador
Ha pasado ya un año desde que el pequeño niño se propuso recuperar el orgullo de su familia, ahora tiene nueve años y ha mejorado bastante su habilidad no tanto como un chef profesional pero se sabía defender, estábamos a 5 días de su décimo cumpleaños pero no sabía que algo pasaría para ese entonces.

5 de Septiembre del 2008
Comedor Matsumoto

Hina - Hijo tienes muchos cortes en tus manos, ten más cuidado por favor - dijo preocupada mientras sanaba las heridas del pequeño -.

Eitan - *Auch*si mamá ya lo se, no te preocupes *auch* por mi.

Ella sabía que los cortes, quemaduras y desvelos son partes de este oficio, así que no se preocupo más.

Hina - Bien, hoy te enseñaré una receta especial de la comida japonesa, estás listo? - le pregunto al chico mientras se ponía su delantal para cocinar -.

Eitan - Asombroso, por fin una receta tuya mamá, papá ya me tenía cansado con sus recetas francesas.

Hina - Jajaja verdad que si, bueno pon atención vamos a hacer "Yakisoba" y el ingrediente principal será el pollo.

Eitan - ¡Estoy listo! - grito confiado el chico -.

Hina - Bien, observa que no te volveré a mostrar, 3..2...1... ¡Kiaaaaa!

De repente la personalidad tranquila de Hina cambió a una más energética y determinante, daba unos cortes precisos y rápidos al pollo y preparaba con una velocidad las tiras de fideos pero sin dejar atrás a las verduras, Eitan no podía creer lo que estaba viendo ya que su mamá normalmente cocinaba a una velocidad promedio de un comedor pero sin darse cuenta ya había terminado.

Eitan - No puede ser, tan rápido terminaste - el chico no daba crédito a lo que veía -. Leí que tardabas mínimo una hora o hora y media.

Hina - No te lo tomes a mal hijo pero a veces los libros se equivocan - dijo antes de darle un bocado a su receta -. De - li - ci - oso, ten prueba.

El chico dio un bocado e inmediatamente viajo a un mundo de placer gastronómica, sentía cada sabor en su boca aunque estuviera todo en uno mismo, ninguno se distinguía del otro y junto a esa salsa especial no había sensación que la pudiera descubrir.

Eitan - Está delicioso mamá.

Hina - Me alegro que te haya gustado, bien te toca a ti.

Inmediatamente se levantó de su lugar y se fue.

Eitan - Bien Eitan, tu puedes hacerlo no fue nada complicado - cerro los ojos y dio una gran inhalación de aire y de repente los volvió a abrir -. ¡Aquí vamos!

30 minutos después

Hina - Cómo vas Eitan? Ya terminaste? - pregunto la joven madre mientras volvía a entrar a la cocina -.

Eitan - Aquí está, Yakisoba de pollo estilo Eitan.

Se veía como un plato tradicional de Yakisoba pero tendría su mismo sabor, Hinata tomo una cucharada para probarlo y digamos que su cara dio de que hablar. El Yakisoba de Eitan era un tremendo fracaso, los sabores estaban pasados, aparte el pollo tenía cuero quemado y la salsa estaba muy espesa, fracaso total.

Hina - Hijo - dijo en un tono serio -.

Eitan - No hace falta que lo digas ma, es una deli... - es interrumpido -.

Hina - Es una aberración de comida, en pocas palabras es un asco de plato la verdad, no seguiste mis instrucciones e hiciste todo según tu instinto, así nunca triunfarás.

"El Dragón Culinario - Shokugeki No Soma"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora