Moon bin un chico con una habilidad única, la cuál podrá hacer que nunca pueda conocer el amor como el lo quisiera.
Obligado a hablar sólo con los de su misma especie la cuál tiene la misma habilidad que el.
-No se permiten adaptaciones sin permiso...
Dongmin había salido al supermercado ha comprar algunas cosas para poder hacer la cena de aquella tarde, pero cuando salió de dicho supermercado en la puerta de salida se encontraba una pequeña niña llorando, Dongmin se acerco a ella para ayudarla.
—Hola pequeña, ¿Por qué lloras? —Preguntó Dongmin preocupado por la pequeña.
—Mi mami me abandono, no me quiere — Chilló la niña tratando de calamar su llanto para que si voz fuera más entendíble.
—No digas eso todas las mamás quieren a sus hijos — Comentó Dongmin mientras el y la pequeña tomaban asiento en una de las bancas que se situaban afuera del supermercado.
—Ella me dijo que esperará aquí, y si alguien se acercaba le dijera que me llevará a la estación de policía y les dijera que me habían abandonado —Chilló la niña mientras Dongmin la observaba un poco triste.
—¿Cómo te llamas pequeña? —preguntó Dongmin mientras le regalaba un paquete de galletas a la pequeña, las cuál ella aceptó.
—Me llamó Sin B y tengo cuatro añitos, y usted como se llama? —Respondió la pequeña mientras comía unas cuantas galletas.
—Que lindo nombre, Yo me llamó Dongmin —Respondió a la pequeña.
—Usted me pude llevar a la estación de policías? Mi mami dijo que ahí me ayudarían y me llevarían a un lugar donde podría jugar con más niñas y ahí mi papá no podría haceme daño —Preguntó la pequeña espectante a lo que su mayor contestará.
Dongmin quedó inprecionado con lo que había mencionado la pequeña —Tu papá te trataba mal? —preguntó Dongmin algo triste.
—Sí, a mi y a mi mami, nos pegaba mucho. Por eso mi mami dijo que esto sería lo mejor que estar sufriendo junto a ella —Dijo la pequeña triste.
—ohhh pequeña Sin B ya has comido algo? —Preguntó curioso Dongmin.
—No mi mami me abandono aquí desde las mañana, pero estas galletatitas están muy buenas, gracias —Agradeció la pequeña con una leve sonrisa, por que por fin comería algo después de muchas horas de hambre.
—Te gustaría cenar esta tarde en mi casa con mi novio y después te llevaremos con los policías para que te lleven a un lugar donde vivir junto a más niños? —Preguntó Dongmin con una sonrisa y la pequeña asintió, los dos se levantaron para después emprender camino hacia su casa.
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