III.

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Al parecer no me toma más que 40 min llegar de la casa del alfa a mi escuela y al revés, es un buen tiempo para mentalizarme lo que me espera al llegar a la manada.
Entro a la manada y los guardias solo me ven y me dejan pasar ya saben de donde vengo, supongo que el alfa les aviso, aún no se como agradecerle que haya pagado mi inscripción y pase a la cafetería.

Estaciono y guardo mi moto en la bodega, entro por la puerta trasera que da a la cocina.

-Hola Aria ¿como te fue en tu nueva escuela? ¿Los humanos se portaron bien contigo? - me habla samanta una de los ayudantes en cocina, me pregunta lo último con un atisbo de preocupación, ella sabe lo que eh sufrido como huérfana y humana, desde que mariana murio.

-Bien, sorprendente no son malas personas, al menos las que eh conocido, aunque si son algo alborotados (más las chicas)

-Son adolescentes que esperabas

-Yo igual lo soy

-lo sé, deberías estar babeando por algún chico, yo que se

- Ya sabes porque no me quieren..en fin me cambio y vengo a ayudarlas

Ya en mi habitación me cambio y voy a la cocina.

Es mi rutina de estos últimos años, ayudar en la cocina e encargarme de las necesidades de los huéspedes.
Sin embargo a partir de mis nuevos horarios por mi actual escuela, el alfa sólo me limitó a ayudar en las habitaciones principales y su estudio.

Nadie entendería la armonía con la que se trabaja en esta casa ya que cada empleado ya sabe sus funciones y sobre todo en la cocina, yo soy como una pinche, aunque se me dan muy bien los postres. La chef principal me permite aprender de ella, dice que algún día me podria servir.

Terminada y adelantada la cena, reviso que no falte nada en la oficina del alfa, habitaciones principales. Baños.

Eh aprendido que al menos nuestro alfa es receloso de su intimidad en lo que respecta su habitación y oficina o incluso aveces su biblioteca. Solo hasta el momento tres personas pueden ordenar e limpiar su espacio entre las cuales me encuentro yo.

Es algo quisquilloso, tiene un lugar específico para cada objeto y realmente se da cuenta si algo no está bien no sólo me refiero a su espacio, sino a su manada y en especial su familia. Desde la pérdida de la luna, no se puede negar la tristeza qué lo invade a veces pero siempre tiene sus motivos para impulsarse "su familia".

El alfa es mi unica figura paterna u masculina que eh tenido desde que tengo memoria...

Repaso mentalmente que todo haya quedado en orden antes de salir de la casa principal a mi trabajo el cual es mi sustento... Por el momento

 Por el momento

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Humana entre lobos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora