CAPÍTULO 16

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Una semana.

Joder que ha pasado solo una semana y media y estos idiotas ya parecen hermanos de toda la vida. Al parecer, Eithan y Maykel hicieron las pases.

Salieron de fiesta el fin de semana pasado y en la escuela van juntos para todos lados. La hermana de Eithan no ha dado señales de vida y el tal Elijah, menos.

Los chicos se pusieron celosos de la nueva amistad de Maykel, así que ahora parecen tres lapas pegadas a mi, sin contar a Ana. No le hablan a Maykel, le hacen la ley del hielo. Bien pendejo para mi gusto, pero tampoco me quejo de su compañía, son bastante entretenidos, a Mike le encanta que estén presentes en casa ya que tiene a mas jugadores para el FIFA.

Hablando de Mike, hoy tenemos planeado salir a enseñarle a andar en skate. Y dije tenemos, ya que las tres lapas también van a ir.

Incluso cada uno se compro un skate.

— ¿A donde van?.

Me giró y Maykel esta en el umbral de la puerta del baño con un brazo apoyado a la altura de su cabeza.

Dejo el rímel en un estuche y me coloco perfume.

— Voy a enseñarle a Mike y a los chicos a andar en skate.

El entra al baño y se apoya en el lavamanos, dándole la espalda al espejo. Dejo el perfume en la repisa y el lo vuelve a tomar para olerlo.

—Nunca imaginé que fueras ese tipo de chicas.

Apoyo el lateral de mi cadera en el lavamanos y me cruzo de brazos mirándolo.

— ¿Que tipo de chica creías que era?.

Se coloca un poco de perfume en su muñeca y vuelve a dejar el perfume en su lugar. No me mira, simplemente se cruza de brazos y mira al frente.

—mmh, pensaba que eras la típica chica fresa que le teme a romperse las uñas, claro que eso era antes de que tirarás a mi ex a la piscina. Cada día me sorprendes con algo nuevo.

Esta vez me mira y se coloca serio.

—¿No tienes nada con Eithan verdad?.

Lo miro sería.

—¿Porque me preguntas eso?.

El suspira y suelta sus brazos. Se gira hacia mi y me agarra de los hombros agachandose un poco a mi altura.

— No te enojes, lo pregunto por que ahora que volvimos a ser amigos no quiero que vuelva a pasar algo similar... yo...

No termina la frase y se aleja.

—¿Tú que?. Mira ya me contaron lo que sucedió contigo y la hermana de Eithan, pero eso no significa que yo me prestaré para lo mismo...

—¡No te contaron todo!. ¡No solo me equivoque yo!, ¡todos cuentan una parte pero no cuentan la parte en donde me hacen mierda a mi!

Cierro la boca, por el reflejo del espejo puedo ver que tiene una mueca y los ojos llorosos.

¿Desde cuando empezamos a consolar a todo el mundo?.

Paso por su lado y cierro la puerta del baño, escucho como comienza a llorar y me desespero.... ¿que hago?, me giró hacia el y lo primero que veo es el lavamanos, me subo sentándome y lo agarro de los hombros para empujar su cuerpo hacia mi. Inconscientemente me abraza, y se acurruca en mi pecho, quedándose ahí.

Comienzo a escuchar cómo solloza y me pongo nerviosa. Una cosa es consolar a los demás y otra muy diferente es consolar a Maykel.

Levanto mi mano y comienzo a sobar su espada, la otra la llevó a su cabello, ese que tanto le gusta revolver y comienzo a masajerale.

—¿Quieres contarme lo que realmente sucedió?.

El suspira y esconde su cabeza en mi cuello, apreta más sus brazos alrededor de mis cintura y no me queda de otra que pasar una de mis piernas al otro lado de su cadera.

¿Y esas mariposas?.

¡No hay ninguna mariposa!.

Si,si, algún día lo admitiras.

—Es verdad que estuve con la hermana de Eithan, el nos advirtio que estaba prohibida.— comienza a murmurar desde mi cuello.— Pero simplemente paso, un día ya no la miraba como la niña que vi crecer junto a mi, si no como una chica... normal.

Suelta un poco su agarre y vuelve a apretarse  a mi.

— Ella fue la que se acercó, en ese tiempo yo solo era un crío, que una chica se acercara era lo cool en ese momento. Comenzamos a hablar, a vernos a escondidas de Eithan. Hasta que esas escondidas se transformaron en besos, miradas y tomadas de manos.  Un día no pude más, le conté a Elijah y el dijo que me apoyaba, que debía contarle a Eithan, que la mentira era más fea que el hecho mismo... le creí, le creí como un maldito idiota.

Vuelve a sollozar, sus lágrimas caen en mis hombros... y se me estruja el pecho. No se por que, pero me duele, me duele verlo y escucharlo así... así de roto.

—Le conté a Eithan y nuestra amistad se fue al carajo. Comencé a hacer fiestas cada vez que mis papás salían y a esas fiestas invitaba a Elijah. Meses después, papá coloco cámaras de seguridad, solo yo sabía que estas existían y después de cada fiesta las revisaba desde mi portátil para borrar los videos y cambiarlos por otros donde no salía nada...

Maykel se queda callado y me hago hacia atrás para mirarle un poco la cara pero el gruñe en respuesta.

—Supongo que viste algo que no te gustó en esas grabaciones.

El asiente.

—Ya habia visto como se miraban, incluso desde antes que estuviera conmigo, pero simplemente no le quise hacer caso. Ese día... recuerdo que era invierno, era de madrugada y estaba lloviendo, la fiesta apenas había terminado y me tocó revisar las grabaciones, la sorpresa que me lleve fue asquerosa. E-llos... ellos estaban en la habitación de invitados...

Ya me imagino lo que estaban haciendo, que rabia, ¿como la gente puede ser así?, herir de esa forma a los demás solo por capricho...

—Mi novia y mi mejor amigo, estaban tirando en esa habitación... Pero eso no es lo peor, a los minutos me llegó un mensaje a la laptop que decía que ella me estaba usando para poder irse con una beca a Francia... ¿lo crees?.—no respondo.—Todo por una puta beca. Elijah se mudaría a francia a estudiar y ella se quería ir con el. Mi padre tenía contactos, asi que cuando me dijo que su sueño era ir a estudiar a ese país, lo primero que hice fue hablar con papá.

—Es una maldita arpía aprovechadora y el idiota ese no se queda atrás.

El se ríe y se separa un poco de mi para mirarme a la cara. Por hades, tiene los ojos hinchados, al igual que sus labios y nariz.

Aún así es perfecto.

Te apoyo en eso.

Llevo mis manos a su rostro y limpio los rastros de lágrimas que hay en sus mejillas.

—Eres alguien increíble, esa perra no te merecía, personas como ella jamás serán felices y el tiempo se encargará de hacerla pagar.—susurro. El se queda mudo y lo único que hace es mirarme.

Atraigo su cabeza y pego su frente con la mía.

—Tomaste una mala decisión y te enamoraste de quien no debías. Pero no fue culpa tuya ni de Eithan. Tuviste la mala suerte de caer en las redes de una manipuladora...Y por mi no temas, Eithan es sólo mi mejor amigo, para mi el no tiene pene. Es como mi amigo gay.

El rie y mira mis labios.

—Ahora hay un problema más.—susurra.

—¿Que cosa?.

—Que aún no aprendo a no decepcionar a mis seres queridos.

Siento como coloca una de sus manos atras de mi cabeza y sin dejarme reaccionar me
empuja un poco para cerrar el espacio que había... besandome.

HuérfanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora