El chico de las flores • kookv

🌻Capítulo•11

—¿C-cómo dices?—Jungkook para ese entonces tenía una mirada que causaba pena hasta a un vagabundo. Era indescifrable pero triste sobre todo.

¿Qué sentía con exactitud? Ni él lo sabía. Estaba triste y decepcionado, eso es seguro. Pero él lo sabía, había considerado el hecho de que a Taehyung tal vez no le gustasen los chicos y tal vez debía haber seguido considerando eso antes de ilusionarse de esa manera.

—Emh...—Jimin y Jin por su parte no sabían qué hacer. Quizás hayan sido demasiado directos por el susto que les había provocado la anterior situación. Y ahora el pobre chico les lograba trasmitir su pena y ellos no podían sentirse peor—No estés así...

Pero sólo bastó decir eso combinado con los tristes sentimientos del chico para que Jungkook comenzara a llorar...sí...A LLORAR.

Los otros dos entraron en pánico —No, no ,no—se apresuró a decir Jin acercando sus manos tímidas al pobre joven ,sin llegar a hacerlo porque había comenzado a llorar más fuerte. Todo el tiempo con los ojos cerrados. Su aspecto era miserable y no le quedaba nada para moquear.

Jin miró al pequeño Jimin "¿Ahora qué hacemos?"

Casual, ¿nunca habían visto a dos personas conversar por telepatía?

Jimin le correspondió la mirada "No sé. El pobre"

Pasaron a susurrarse—Vamos a ayudarlo Jin.

—¿Y qué hacemos? Es imposible—le reclamó mirando las lágrimas de Jungkook escurrir hasta su cuello.

—No si lo ayudamos a enamorar a Tae.

—¿Te volviste loco Jimin? Tae nunca...—y en ese instante se fue todo a la mierda porque Jungkook había abierto sus ojos y los estaba mirando con dos lagunas que parecían tener reflejadas la inmensidad del universo—Bebé~—Jin lo abrazó pensando en él como su hijo. Ya era su hijo. Posiblemente hoy mismo solicitaría su adopción—No llores, mamá y tío Jimin te ayudaremos—Jungkook se permitió recostarse en su pecho. Cuando estaba así ganaba confianza rápido.

—Pero yo quería ser la mamá —reclamó Jimin abrazando del otro lado al pelinegro, y aprovechando un poquito para acercar su mano a su trasero. Mano detenida por un manotazo del mayor de los tres.

                                   🌻

—Entonces...¿entendiste?—preguntó Jimin a un Jungkook con la cara roja de tanto llanto.

—Si...—estaba cabizbajo en su asiento con su rosa entre sus manitas .Una imagen lamentable.

Estaban sentados en un banco de los jardines del campus de artes visuales.

—Pero en verdad te queremos ayudar...y así ayudar a Tae—dijo Jin apenado.

—¿Tae?—los miró el pelinegro, sus ojitos se volvieron a aguar y los mayores entraron otra vez en estado de alerta ; se acercaron a él dispuestos a abrazarlo—¿Algún día podré llamarlo así?

—Si, si, si te lo prometo—se apresuró a decir Jin antes de que la cascada andante llamada Jungkook comenzara a correr por su rostro.

Jimin le susurró al oído al mayor—No creo que a Tae le gusten los pasivos ¡Auch!—Jin le había propinado un codazo en sus costillas.

—Tal vez no sea tan pasivo—le susurró enojado.

—¿Tú crees?—Jimin señaló al pelinegro.

Ambos vieron su linda carita de niño llena de lágrimas y sus manos jugando entre sí con su rosa. Definitivamente la imagen de un niño de cinco años.