El chico de las flores • kookv

🌻Capítulo•19

🌻Narra Jungkook:

Lunes de mi segunda semana en la Universidad Nacional de Artes de Seúl y no puedo estar más animado. En gran parte porque podré dedicar mi día a inspeccionar las otras escuelas, puesto que adelanté todos mis proyectos. Y dirán ¿por qué tan emocionado por ver unas escuelas donde lo único interesante es el sonido del timbre para salir de semejante infierno? Pues déjenme recordarles que mi universidad, no es cualquier otra universidad donde los estudiantes corren por todos lados cargados de libros y preocupaciones; aunque la semana pasada estuve cargado de libros. En una universidad de artes ,y más si es tan importante como la mía, las escuelas siempre están rebosantes de alegría y claro está, puedes encontrar el arte donde sea que mires. Lo encuentras en las coloridas paredes; en los diseños de carteles e interiores; en las tv's con promociones hechas por diseñadores gráficos o cortos cinematográficos hechos por estudiantes de dirección y producción junto a estudiantes de la escuela de drama; lo encuentras en las voces emitidas por la radio y en un bailarín ensayando en el campus al aire libre. Y por esto, es fácil amar mi universidad y no importa cuán difícil sea, no dejaré de amarla.

Para contarles un poco de mi día, les diré que me encuentro en el horario de la tarde, el cual tengo libre para explorar como antes dije. Mi mañana fue tranquila así como para los demás estudiantes de música por lo que pude ver. Mis almuerzos ahora son con Yoongi Hyung y Hobi Hyung y como supuse, mi nuevo amigo es una verdadera bendición. Es un chico muy carismático con el que nunca te aburres. A pocos días de conocernos ya tengo mi móvil repleto de fotos con él del día de ayer en la florería. Aprovechamos ese domingo en que hubo poca clientela para tomarnos fotos todos los presentes y yo publiqué algunas con Hoseok en mi Instagram. Hace mucho que no publicaba. En fin, lo fundamental es que puse la flor en el casillero de Tae. Espero que le guste.

Mis planes han cambiado, por cierto. Debido a algo que recordé. No voy a dar un tour por las escuelas, sino que voy a ver a Tae. Necesito mi cinturón. Hoy había querido vestirme especialmente bien y necesitaba mi único cinturón negro. ¿O de qué otra manera me sugieren combinar una chaqueta negra y un pantalón de mezclilla claro? No, no iba a usar un cinto de un color que no fuese negro. Como decía, iré a verlo, por el horario visible para todos los estudiantes en la web de la universidad, sé que no tiene clases dentro de una hora, y también sé a qué salón de clases debo dirigirme.

Sin más, comienzo mi caminata hasta el segundo piso en el salón de los instrumentos. Que recuerdos más vergonzosos me esperan ahí. Y cuando llego veo a los alumnos salir del salón y logró localizar entre todos una cabellera dorada.

—¡Tae!—le llamo y enseguida se gira en mi dirección. Pero evita el contacto caminando a paso acelerado entre los estudiantes. Me parece raro. Él me vio. Entonces pienso mejor y caigo en cuenta de que es la hora de almuerzo de los estudiantes de tercer y cuarto año.

Esperaré a que su almuerzo termine para pedírselo.

                                   🌻

🌻Narrador omnisciente:

La gran cafetería de la escuela de música era muy frecuentada, hasta por estudiantes de otras escuelas, y se debía a la agradable música que emitían las bocinas a diferencia de las otras escuelas. Por esta razón, justo como hoy, estaba inundada de personas que iban de aquí para allá riendo. Cabe agregar la buena calidad de la comida; aunque claro está que los otros campus también cuentan con buenas cafeterías con todo tipo de productos, siendo muy especial la de la escuela de danza, ya se imaginarán porqué; esa tiene más variedad en alimentos que las otras.

Sin extendernos les diré que en esta agitada cafetería, un pelinegro esperaba paciente en una de las mesas a Taehyung, quien se encontraba a unos cuantos metros de él en una mesa ocupada en su totalidad, acabándose su almuerzo. A causa de estar los asientos ocupados, no pudo sentarse junto a él, aunque fácil Tae hubiese elegido otra mesa para sentarse con el pelinegro. Pero había preferido esa aún sabiendo que el chico lo esperaba. ¿Por qué? Porque lo estaba ignorando. Lo había decidido de forma definitiva al ver esa foto junto a un rubio. ¿Celos? "No" decía el de hebras doradas.