CORREGIDO
Llevamos unos cuantos días como novatos en la legión de reconocimiento, mayormente hemos hecho trabajos arreglando el nuevo cuartel de la legión de reconocimiento, pues tuvieron que hacerse algunos cambios debido a la entrada de Eren. La división está llena de gente algo peculiar pero hay una persona bastante curiosa entre todos ellos, su nombre es Hange Zoë y aparentemente tiene una fijación por los titanes, de hecho... se ha traído dos.
Sí, dos titanes se encuentran atados en el distrito y aquella persona los mira como si fueran lo más maravilloso que jamás hubiese visto.
— Dicen que se quedaron dentro de Trost y logró traérselos. — habla Sasha mientras los miramos de lejos, como buenas novatas, nos han enviado junto con un capitán a recoger documentos.
— ¿Qué no le dan miedo? — pregunto yo. — ¿No tiene suficiente con los que vamos a ver en la misión?
A pesar de los pocos días que llevamos como miembros, ya hemos pasado la mayor parte de nuestro tiempo haciendo preparativos para la expedición afuera de las murallas, el ánimo comienza a mejorar un poco debido a la expectativa de aquel viaje, en especial el de Eren, a quien Jean ha designado como conejillo de indias debido a los experimentos que Hange realiza con él.
— No se ve asustada ¡Mírala podrían comérsela en cualquier momento! — suelta tomándome con fuerza del brazo.
Yo me río un poco, aunque tiene razón, la comandante de sección Hange parece querer meterse deliberadamente a la boca de ese titán sin la mínima pizca de susto, no puedo creerlo.
— Ese titán la está mirando como tú ves a tu estofado cuando tiene carne. — la molesto, en parte para deshacerme de los nervios que me causa presenciar esto.
— ¡Oye! — responde ella en medio de una risa y codeándome levemente. — Bueno, puede que tengas poquita razón.
Vuelvo a reír.
— ¡Cassel! ¡Brauss! Tenemos lo que buscamos, iremos de regreso al cuartel. — habla el hombre con el que venimos haciéndonos una seña. Es alto y rubio, lleva una barba casi al ras de su rostro y parece siempre estar oliendo a su alrededor.
La legión está llena de gente rara.
— ¡Sí señor! — respondimos ambas
Sasha y yo caminamos/corremos a su encuentro y lo seguimos fuera de la entrada al distrito para llegar a donde nuestros caballos han quedado atados, miro a mi yegua y saco un terrón de azúcar de la bolsa de mi chaqueta, se lo tiendo con calma y espero a que se lo coma antes de montarla con no mucha gracia. Es gracioso, porque una de las primeras cosas que nos enseñaron como cadetes fue montar a caballo (incluso si la legión de reconocimiento es quien más lo hace), quisiera decir que fue fácil al inicio, pero estaría mintiendo, tardé bastante en entender la lógica de subirme al caballo. Sin embargo, ahora lo hago decentemente bien.
— Vamos niñas, volvamos. — indica el hombre una vez que estamos arriba de los animales y emprendemos el camino de vuelta a los cuarteles.
***
— ¡Les puso nombre! — le digo a Jean mientras tomo de mi cantimplora. — ¡Casi le dan una mordida y les puso nombre!
Mi amigo suelta una risa divertida, tenemos un rato libre después de haber limpiado las caballerizas y por alguna razón nos encontramos solos en un balcón algo alejado de los demás, lo cual me hace sentir rara, pues durante los últimos días estos extraños pero amenos momentos a solas se han vuelto una costumbre entre nosotros, no sé qué pensar de ello, pues ahora que vivo resignada a ser parte del círculo de amores no correspondidos, quedarme a solas con Jean acelera mi corazón.
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About Last Night / 𝐉𝐞𝐚𝐧 𝐊𝐢𝐫𝐬𝐜𝐡𝐭𝐞𝐢𝐧
FanfictionSer un soldado es vivir en un infierno, especialmente si eliges la Legión de Reconocimiento. Es bueno tener a alguien acompañándote. TODOS LOS PERSONAJES A EXCEPCIÓN DE LA PROTAGONISTA LE PERTENECEN A HAJIME ISAYAMA. EL FANART DE LA PORTADA NO ES...