Capítulo cuarenta y cuatro.

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⚠️ TW: Gabi siendo Gabi con comentarios racistas.

Me quité el equipo de maniobras y me di la tarea de acomodarlo en su lugar junto con todos los demás, me temblaban las manos y me sentía exhausta, a penas habíamos llegado, Sasha y Jean habían sido apartados, el castaño seguía con vida y estaba con un doctor, Sasha simplemente no lo había logrado y la habían llevado a un cuarto para llamar a su familia, yo me encontraba tan ansiosa que no podía concentrarme en nada, la conversación con Jean se repetía una y otra vez en mi cabeza.

Sería un sueño, casarme contigo Ellie es mi mejor sueño.

— Como decía, Eren ahora es nuestro héroe ¿si lo saben verdad? Nos ha salvado, le ha mostrado a mundo lo que pasará si se meten con nosotros...¿por qué mierda lo están encarcelando...? Estúpida comandante con su estúpida moral...

Tal vez era por todo lo que acababa de pasar, tal vez era que yo necesitaba una manera de sacar todo lo que estaba sintiendo, tal vez era que el dolor físico y mental estaba nublando mi juicio y me tenía harta, pero solté un golpe y la satisfacción que me dio...nunca me escucharían hablar de ella en voz alta.

— ¡Ellie! — escuché a Armin ¿o había sido alguien más? No podía ver más allá, tenía las emociones a flor de piel.

— Te juro Floch, que si dices una jodida palabra más, mi próximo golpe va directo a tu descendencia. — amenacé, sacudiendo mi mano adolorida por haberle pegado al muchacho.

— ¡¿Qué mierda te pasa?! Si quieres pegarle a alguien suéltale un golpe a los niños que apartaste de nosotros, ¡te recuerdo que esa mocosa es la responsable de la muerte de Sasha y de tu novio! — me gritó sobándose el rostro.

Aquellas palabras se sintieron como una cachetada.

— Jean no está muerto. — musité herida de pronto. — Y no tienes ningún derecho para hablar de Sasha así que cierra tu enorme bocota...

Floch se rió con amargura y giró para verme, tenía sangre en la comisura de la boca.

— ¿O qué? ¿Vas a golpearme otra vez? Porque te aseguro que tengo más fuerza que tú, a penas puedes mantenerte en pie y Kirschtein no está para defenderte...

— Piensas muy bien de ti mismo ¿no Floch? — enarqué una ceja.

— Es suficiente. — se escuchó desde la puerta.

Ahí estaba, lucía exhausto y aún no se cambiaba el uniforme, parecía como si hubiese usado un trapo húmedo para limpiarse la sangre del rostro y ya no llevaba la capa, el capitán Levi me miraba con severidad y, a pesar del cansancio, sentí un escalofrío recorrerme el cuerpo, mi corazón se aceleró y me preparé para pasar una noche encerrada por mi mal comportamiento.

Ya no tengo mucho que perder ¿no es así?

— ¿Qué hacen aquí? Vayan a dormir, mañana tienen que llenar los reportes y no voy a permitir que se queden dormidos y babeen las hojas, Springer, la comandante te quiere en su oficina, Cassel, ven conmigo. — habló con severidad. — Si vuelvo a asomarme y siguen aquí van a lamentarlo.

Su mirada oscura se posó en mí mientras caminaba fuera de la bodega donde guardábamos los equipos, no podía mantenérsela mucho tiempo, una vez que estuvimos fuera me preparé para disculparme y probablemente recibir un golpe por su parte.

— Lo siento, sé que no debí hacerlo... — comencé.

— Necesito que lleves a los niños al sótano, están en la cocina custodiados, mañana vendrán para trasladarlos. — ordenó. — Te veré en las escaleras cuando acabes.

About Last Night /  𝐉𝐞𝐚𝐧 𝐊𝐢𝐫𝐬𝐜𝐡𝐭𝐞𝐢𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora