About Last Night / 𝐉𝐞𝐚𝐧 𝐊𝐢𝐫𝐬𝐜𝐡𝐭𝐞𝐢𝐧

Capítulo cincuenta y cinco

CW ⚠️: violencia y uso de armas.

— No hablas enserio. — murmuro. — ¡Tiene que haber otra manera de hacerlo!

Annie no cambia su expresión.

— Al final todo se resume en eso, si no nos apresuramos y acabamos con ellos de tajo, perderemos la aeronave y moriremos en el intento. — insiste la rubia.

— Pero aún así ¿acabar con todos ellos? Annie es demasiado. — responde Connie con la voz temblorosa.

El puerto fue tomado por Floch y los jaeggeristas, por lo que no podemos tomar la aeronave que nos llevaría a Marley, proteger a los Azumabito (ya que son los únicos que pueden preparar la máquina) y huir sin desatar un desastre (especialmente porque sería muy extraño subir a los tipos que supuestamente son nuestros enemigos) las cosas serían considerablemente más sencillas si pudiésemos esperar para tomar la aeronave sin dañar a nadie, pero todos sabemos que se defenderán en cuanto nos vean.

— No podemos tomar la aeronave, proteger a los Azumabito y evitar dañar a la facción Jeagger al mismo tiempo, no resultará ¿me equivoco? — habla Annie.

— No, dentro de la facción Jeagger se encuentran antiguos compañeros...no quisiéramos herirlos. — responde Jean, hablando por todos nosotros.

Aparto la mirada, sé que es cierto, pero aún así... no puedo creer que a esto hemos llegado, es demasiado, es...lo que se tiene que hacer y lo odio.

— Pero claro que ustedes no pueden tomar esa decisión, no los someteré a eso. — concluye Annie.

Reiner da un paso al frente, por alguna razón, al no querer concentrarme en la conversación, soy consciente de los ruidos y movimientos a mi alrededor, Gabi y Falco murmurando, el peso de Reiner quebrando una ramita, los pájaros en el cielo...

— No tienen por qué pelear, pueden quedarse en un lugar seguro con Gabi y Falco mientras nosotros nos encargamos. — habla él.

Y mirar cómo acaban con nuestros compañeros...

— ¿Y ser meros espectadores de la masacre? — pregunta Connie.

Hange vuelve con nosotros, se resbala de la pequeña colina en la que miraba el puerto junto con el capitán de Marley, guarda el telescopio en su cinturón.

— No seré un espectador solamente, ya acabé con cuatro hombres de la facción Jeagger anteriormente, sería hipócrita decir que no puedo hacerlo. — habla mientras se recarga en la misma colina por la que se delizó. — Además, mientras más tardemos aquí, el retumbar avanza más, el norte de Marley debe estar en graves problemas ahora.

Siento mi corazón dar un vuelco dentro de mi pecho mientras la resignación se apodera de mí y veo como las posturas de Reiner, Annie, los niños e incluso la de Pieck metida a medias en el titán carreta se tensan, quiero negarme, porque esto está mal pero ¿cuántas cosas he hecho ya que consideraba estaban mal? ¿Cuántas vidas he quitado hasta este momento?

¿Serías capaz de acabar con la vida de tus antiguos compañeros Ellie? ¿Esos que pelearon a tu lado y vivieron un infierno junto a ti?

El hombre, Magath, camina hasta Yelena y le cubre la boca mientras le dobla el brazo.

— ¿¡Hacia dónde se dirige Eren Jeagger!? ¿¡Cuál es su destino desgraciada!? — demanda.

No puedo apartar la vista mientras Magath tortura a aquella mujer, mis ojos parecen haber quedado atascados en aquella dirección, los cierro sólo cuando escucho el crujido de un hueso, mi mano busca la de Jean mientras el capitán sigue demandando información que Yelena parece muy indispuesta a dar. Me siento algo mal por ella, pero cuando dice que quiere que la llevemos con nosotros para ver el fin del mundo, mi empatía comienza a flanquear.