Posiblemente, por primera vez en decenas de años, la secta Jin hacía digno sus colores dorados, convirtiéndose en una luz, un sol para todo el mundo de cultivo. Xichen había temido tener complicaciones para poder ingresar; pero, no hubo mayores problemas con el acceso a Torre de Koi. Los Jin mantenían una fuerte vigilancia alrededor, pero estaban atentos y predispuestos a socorrer y recibir a todos los miembros de las demás sectas de cultivo, sean estas grandes o pequeñas. Siendo Xichen un líder conocido de una de las sectas principales fue llevado al salón principal de inmediato, aunque las miradas de lástima de los discípulos no pudieron ser evitadas. Xichen las soportó con dignidad, no tenía sus túnicas características y recién había podido colocarse su cinta. Cuando estuvo huyendo, A-Yao le indicó que la escondiera por obvias razones.
Pronto, Jin Zixuan ingresó al salón para recibirlo. En su rostro había una mezcla de emociones. Entre un poco de alivio, un poco de suspicacia y también lástima. Aun así, le saludó con cortesía. Parecía que habían pasado décadas desde que el joven maestro acudió a la asamblea donde los Lan.
—Líder de secta Lan, realmente pensamos que usted...—Se interrumpió incómodo. — Se dice mucho sobre lo que sucedió, pero creeré lo que venga de su propia boca. ¿Es verdad que la secta Jiang ha abandonado al mundo de cultivo para unirse a los perros Wen?
Había mayor madurez en el gesto del joven, como si hubiera madurado unos cinco años en aquel proceso. Seguramente no fue fácil para él, arrestar a su propio padre y luego enfrentar a los Wen que se habían asentado. Era sin duda, admirable. El aire respetuoso que emitía, así como sus feromonas bien equilibradas, le hacían evidenciar sus dotes naturales para el liderazgo.
—Creo que eso solo puede decírnoslo A-Cheng...es decir, el líder de secta Jiang. —Replicó Xichen. Realmente, desearía no volver a hablar de él.
—¿Acaso no traicionó y entregó a la secta Lan? —Comentó Jin Zixuan con gesto severo.
Xichen desvió la mirada. Los recuerdos asaltaron su mente y fue doloroso nuevamente.
—De alguna manera, lo hizo, pero fue chantajeado para hacerlo...Es algo que debo confrontar yo con él.
Un suspiró escapó de la boca de Zixuan. Parecía que también era espinoso tratar el tema de la secta Jiang.
—Entiendo, entonces, la justicia que merece por su traición como ex miembro de su familia solo le pertenece a usted y a la secta Lan. —Decidió. De repente, su voz se agravó y su mirada se hizo más dura. — Pero, si Jiang Wanyin decide oponerse a nosotros y aliarse en definitiva a los Wen, discúlpeme, pero tendré que enfrentarlo y asesinarlo igual que a todos los Wen. —Sentenció con voz firme, usando sus feromonas para darle mayor peso a su sentencia. Después de todo, Jin Zixuan era el líder de la resistencia y todas las pequeñas sectas lo seguirían.
Xichen sintió de repente el impulso de saltar a defender a Jiang Cheng, pero no podía contradecir esas palabras. La secta Wen casi había aniquilado su familia. Todos esos muertos merecían justicia. Confiaba en que Jiang Cheng jamás se pararía al lado de los Wen para protegerlos y que sus actos solo fueron guiados por el amor hacia su secta. Aunque, quizás sus expectativas deberían de bajar para no sentirse decepcionado más adelante. El amor era un sentimiento complejo y difícil de manejar. ¿Si Wen Ruohan le promete darle un lugar a su lado, Jiang Cheng aceptaría por amor a los suyos? Lamentablemente, no podía evitar pensar en una respuesta afirmativa.
—Solo he sabido por rumores lo de mi secta. Yo...quiero saber qué más sucedió. —Desvió el tema Xichen, además, necesitaba saber más de su familia.
—Aquí también solo llegan rumores y noticas que expide la secta Wen. Además de lo que nos cuentan los que huyen. Pero algo que ha sido confirmado es ... Por favor, tómelo con calma, vamos a invertir la situación....
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Betrayal Love
FanficLuego de caer en la trampa de un enemigo, Xichen y Jiang Cheng se ven forzados a comprometerse en matrimonio para reparar el honor de Jiang Cheng y su secta. Sin embargo, aunque ambos han sido amigos desde niños, Xichen tiene un amor del pasado que...