Betrayal Love

Capítulo 4: Pesadilla interminable

Realmente existían muchas situaciones injustas en la vida, porque, si hubiera ocurrido en otra ocasión, Wei Ying se habría tirado al suelo de risa al divisar como el pavo real se desmayaba porque su hermana se había comprometido con un hombre mejor. Y es que, por supuesto, su shijie se merecía al mejor cultivador; sin embargo, eso cambiaba cuando ese nombre era Xichen. Los segundos se alentaron, el silencio fue seguido del ruido seco de Jin Zixuan cayendo al suelo, de los gritos de Madam Jin y del enorme "wow" de los demás invitados. Era el momento de gloria de Madam Yu y el de vergüenza de Madam Jin. La venganza era perfecta, opinaba Wei Ying, solo que quizás la dama no calculó el daño que le hacía a su hijo menor. Tuvo que sujetar rápidamente a Jiang Cheng y taparle la boca ante el grito que iba a soltar. A lo lejos, vio a su hermana quedarse tan pálida al igual que lo estaba el Lan mayor.

—Lan Zhan, creo que tu hermano va a necesitarte. —Urgió Wei Ying. Había mucho que aclarar, pero frente a todas las sectas no era buena señal.

Lan Zhan asintió aun estupefacto del anuncio anterior. Se acercó a su hermano y posó su mano sobre su hombro, brindándole un apoyo silencioso. Xichen reaccionó gracias a aquel toque. Por supuesto, sabía que lo habían comprometido, pero no se esperaba que lo anunciaran tan pronto frente a todas las demás sectas, era un claro gesto de presión de su tío. No sabía qué hacer. De inmediato, giró su vista buscando a Meng Yao y vio como el sirviente en silencio se marchaba. Deseó seguirlo, pero pronto su tío lo llamó hacia la mesa. No existía manera de escapar sin avergonzar a su familia, no podría causar tremenda vergüenza con su tío y hermano presentes.

Mientras tanto, los sirvientes Jin se arremolinaron alrededor de su amo y entre todos lo levantaron. Madam Jin se retiró totalmente herida por su mejor amiga, sintiéndose humillada y traicionada por ella. Dejaría que ganase esa victoria, pero definitivamente se las cobraría. Ella era una omega por demás orgullosa.

Madam Yu llamó a su hija mientras Fengmian sonreía encandilado ante el rostro satisfecho de su esposa. Pero luego se dio cuenta que su hija se quedaba quieta y tenía un aspecto enfermizo. Los murmullos se extendieron. Yanli avanzó lentamente deseando huir, queriéndose fundir en la tierra. Giró levemente su vista hacia sus hermanos, pero estos ya no se encontraban ahí.

Los chicos se pararon al medio de Madam Yu y Qiren mientras los aplausos les dejaban sordos. Aquella jugaba les dejaba pocas opciones que no humillasen a sus respectivas sectas. Tuvieron que permanecer en incómodo silencio, sin mirarse entre ellos durante todo el banquete.

......

Las humillaciones habían sido una constante en su vida, una tras otra. Había aprendido que siempre el que está más arriba puede humillar al de más bajo. No importa en qué nivel estuviera, siempre sucedía. Aun entre sirvientes, los que tenían mayor confianza de los amos humillaban a los que no. Entre la familia líder también sucedía, su amo y la madre de este eran constantemente humillados por la madre de Mingjue, ella estaba arriba, así que era natural hacerlo. Sin embargo, jamás se esperó una humillación provenir de Xichen. Al inicio caminó, luego corrió siendo seguido por Huaisang. Al llegar a su habitación se encerró, el joven amo omega tocó su puerta con insistencia. Ninguno se lo había esperado y por el rostro de Yanli y Xichen ellos tampoco. Aun así, dolía, había creído que era importante para el joven amo Lan.

—Meng Yao, abre por favor. Veremos qué hacer. Seguramente es una decisión del tío de Xichen. Lo veíamos venir. Estoy seguro que el hermano Xichen te ama.

—Joven amo, por favor.

La voz de Meng Yao salía entrecortada por el llanto. A pesar que nadie lo sabía se sentía humillado, una vez más en su vida utilizado, sin poder ocupar un lugar importante al lado de su pareja, siendo relegado por una joven de mayor estatus.