"Recomenzar"

☆Capítulo 8 - Ellos solo quieren ayuda

Phoebe_ Cre-crei que habías dicho que este lugar contenía el ruido...

Finn_ Y lo hace... pero no uno tan fuerte, debemos salir de aquí. 

Ambos fijaban su mirada aterrados a la puerta y el como un sonido de disturbio mezclado con los horribles gritos de esas criaturas se escuchaba cada vez más cerca.

Phoebe_ Finn lo... lo siento, de verdad esto es mi culpa, ¿porqué discuti? Soy tan tonta.

Finn_ No es cierto, pero debemos hablar de eso después, hay que irnos.

Dijo acercándose a la puerta mientras que Phoebe se encontraba muy arrepentida por su violenta actitud anterior tan solo conteniendo sus lágrimas, Finn estaba a punto de quitar la silla para que pudieran salir cuanto antes pero era demasiado tarde, habían llegado demasiado rápido y en tan solo unos segundos un montón de ellos corrían directo hacia la puerta seguidos por cientos más, los primeros se estrellaron contra ella y trataban de abrir a la fuerza con golpes desesperados.
Finn retrocedió asustado hasta la princesa que se hallaba igual, tratando de hallar una solución.

Finn_ Eso no va a resistir.

Phoebe_ ¿Y si vamos a la habitación de arriba donde pusiste la película?.

Finn_ Eso sería peor, en algún momento abrirían y nos devorarian o algo peor.

Phoebe_ ¿¡Y que hacemos!?, no puedo usar lanzallamas contra todos ellos.

El joven empezó a observar sus alrededores desesperadamente hasta que logró ver un ducto de ventilación a una distancia baja del suelo en la pared.

Finn_ ¡Ahí!.

Señaló al ducto y ambos corrieron hacía allí, Phoebe pudo jurar que en ese momento escuchó de los parlantes que trasmitían el sonido de la película la voz de su padre diciéndole "No puedes evitar tu naturaleza"  esto la desconcertó pero no había tiempo de pararse a reflexionarlo, ambos tomaron la tapa del ducto que era de barrotes y tiraron de ella con mucha fuerza una y otra vez mientras que los empujones a las puertas eran cada vez más pronunciados.

Lograron abrirla por el deterioro de la misma.

Finn_ Entra tu primero, ¡Ahora!.

Le gritó a Phoebe quien sin perder tiempo intentó entrar, era algo pequeño así que intentó desacoplar su cuerpo para que almenos la poca dispersión de su fuego la ayudará lo cual funcionó, Finn sin embargó ya no se veía muy dispuesto a entrar pues se paró de espaldas al ducto, encarando las puertas y activando su espada de cesped.

Phoebe_ ¿Que diablos haces? ¡Entra ya!.

Finn_ El ducto es demasiado pequeño para mi, sigue tu, yo los contendré todo lo que pueda.

Phoebe_ ¡Este no es momento para jugar al héroe, ven ahora!.

Finn_ ¡Que escapes ya! Recuerda que te quiero Phoebe.

Miraba con determinación a los cientos de criaturas de las cuales una de ellas metió su mano por entre las puertas y logró tocar la silla que la bloqueaba, luego de esto metió a fuerzas su cabeza y dejó caer un chorro de su saliva tóxica encima de ella derritiendola en solo segundos.
Las puertas se abrieron violentamente y la estampida de monstruos corrió de inmediato hacía el chico, este las veía con furia y dispuesto a aceptar su destino sea cual sea, empuñando con fuerza su espada.