(⚔⚡) 𝗪𝗢𝗥𝗧𝗛𝗬 | "La dignidad no
consiste sólo de tener
honores, sino también en
merecerlos"
-Aristóteles
(MCU Fanfiction)
(Thor Odinson x OC)
(Tortured Souls Saga V...
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Le entrego la caja a Thor haciéndole prometer que la ocultarla lo mejor posible. No sabía mucho de estas cosas, pero si Amira me había dicho que estaban más seguras alejadas de más otras yo tenía que creerlo.
Fuera de eso no tenía nada más que hablar con Thor. Ya todo estaba dicho, así que después de asegurarme de que estaría bien decido abandonar la escena. No miro hacia atrás en ningún momento por temiendo que eso me hiciera dudar.
Algo me apretaba en el pecho al pensar en no volverlo a ver jamás, pero no podía pensar en el ahora. Debía tener la mente en el futuro, y tristemente lo veía muy incierto. Sólo me quedaba intentar seguir con mi vida y esperar conocer nuevas personas que me mantuvieran feliz por una temporada al menos.
Siendo inmortal había compartido diversas experiencias con muchísimas personas y en muchísimos lugares. Lo único que tenía asegurado es que todos envejecerían, tendrían hijos y morirían. Todos menos yo que me mantendría joven por muchos siglos más. Sin posibilidad alguna de tener algo permanente.
La única certeza que tenía ahora era que estaba por descubrir sobre mi pasado. Y que tal vez eso llenaría algo del vacío que llevaba cargando toda mi vida.
— ⚔⚡—
📍Queens, NY
La casa de Amira podía pasar por la de cualquier persona. Al ser bruja imaginaba algo tenebroso y mugriento, pero siempre me sorprendía la fachada hogareña.
Al subir las escaleras hasta el pórtico me la encuentro esperando.
—Ya conoces el procedimiento.
Asiento y me quito el brazalete dejándolo oculto entre unas macetas. Al ser un objeto que anulaba la magia no podía entrar a la casa, a no ser que quisiera dejar expuesta a Amira. Ella todavía tenía peligros que la acechaban y vivía oculta desde hacía varios años.
La sigo dentro de la casa observando todo el lugar. Como dije, jamás notarías que esta era la casa de una bruja.
—¡Tatia! —la madre de Amira se me acerca y me envuelve en un efusivo abrazo.
—Hola, Nilsa.
—Ya te extrañábamos.
De reojo veo a Amira poner los ojos en blanco y cruzarse de brazos.
