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—¿Podrías dejar de hacer eso?— gritó Yoon cerrando la puerta del apartamento  observando a Minseok frente a ella dándole la espalda.

Él se dirigió a la cocina para tomar algo de agua, parecía molesto.

—¿Y podrías explicarme el por qué nos hiciste regresar?— una vez más Yoon gritó molesta de la actitud de Minseok de huir de la reunión de pandillas y en eso llevarse a Yoon.

Mientras tanto, Minseok solo se quedaba callado, parecía muy molesto, estaba conteniéndose las ganas de gritar y decir algo hiriente, prefería quedarse en silencio mientras miraba la puerta de la nevera escuchando a Yoon detrás de él.

—¿Que sucede? ¿porque no me quieres decir?— exigió la muchacha pero él volvió a quedarse callado. —Entonces, ¿que se supone que hago aquí? ¿soy tu apoyo o no? ¿para esto escapé contigo?—

Minseok volteó mirándola fijamente, bastante molesto.

—¿No quieres hablar? de acuerdo, me largo.— Yoon se dirigió a la puerta para poder irse a casa de Yixing. Esta fue una pésima idea.

Tomó la fría manilla de la puerta pero Minseok llegó detrás de ella, colocando su mano sobre la puerta evitando que la chica se fuera. Yoon abrió los ojos sorprendida de que Minseok a pesar de todo lo que han pasado, él seguía siendo un idiota.

—Cuida tus palabras.— habló Minseok refiriéndose a las palabras de Yoon.

—¿Ahora no me dejarás salir? ¿es en serio?— volvió a gritar. —No soy tu prisionera, ni tu perro, estoy contigo por voluntad propia y en este momento quiero salir de aquí.—

Minseok volteó a mirarla amenazándola.

—¡Déjame salir!— gritó Yoon. —Si solo voy a ser tu perrita y no contarás conmigo para nada, ¡entonces déjame salir!—

La chica estaba furiosa, pegaba gritos bastante molesta y llena de rabia, reprochándole a Minseok todas sus actitudes estúpidas hacia ella, estaba harta de no poder disfrutar o por lo menos distraerse un rato porque el macho alfa llega y la saca del lugar por molestias o berriches del chico en el momento. Había pasado ya varias veces en donde Minseok sacaba a Yoon a la fuerza de un lugar, odiaba que le hiciera eso, odiaba que tenía que quedarse callada y ser buena, odiaba que él le ocultara tantas cosas, se suponían que estaban juntos.

—¡Si no somos nada entonces déjame salir!— gritó Yoon bastante harta.

—Mi padre se ha comunicado conmigo.— habló Minseok.

La chica quedó en silencio, su rostro de  furia pasó a estar impactada por las palabras de Minseok. Los ojos casi cristalizado de Yoon se notaron más al quedarse completamente sorprendida, ¿Minseok tenía padres?

—Me invitó a una cena familiar esta noche.— volvió a hablar explicando la situación. —Quiero decir... nos invitó.— corrigió.

Yoon ahora se sentía una completa inmadura y llena de mierda, se sentía una niña de siete años haciendo berriches en un centro comercial, se odiaba en su totalidad.

—Mi relación con mi padre es bastante complicada, de hecho.— rascó su cuellos un tanto incómodo. —Una mierda, en pocas palabras.—

Minseok se rascó el cuello pareciendo recordar ciertas cosas con su padre no muy agradables, mientras que Yoon, quitó su rostro de impresión por uno de seriedad.

—¡¿Pero por qué mierda no me habías dicho?!— gritó Yoon harta. —¿Crees que que voy a calmar solo porque tu padre nos invitó a una cena familiar?—

Minseok levantó la mirada con un gesto de culpabilidad, estaba aceptando de alguna manera su regaño.

—¡Sigues ocultando todo!— gritó una vez más. —Sobre este departamento, sobre tu padre, ¡sobre todo!— abrió los brazos señalando el lugar junto a gestos bastante bruscos.

𝐆𝐀𝐍𝐆𝐒  ──  𝐾𝐼𝑀 𝑀𝐼𝑁𝑆𝐸𝑂𝐾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora