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—¡Y entonces lo vi mirándole el culo a Yoon!— gritó Jack con sus ojos rojos e hinchados mientras gigantescas lágrimas que se deslizaban por sus mejillas.

—¡Oh nena!— exclamó Hyuna abrazándola con una botella en la mano.

—¡Sé que es mi culpa!— intervino Yoon con la voz que delataba fácilmente que ya estaba borracha. —P-P-P-Pero ese... ¡hip!... Ese... ¡hip!...—

Jack y Hyuna se quedaron viendo a la chica en plena crisis de hipo con cara de asco.

—¡Ese hijo de puta ya me tenía ganas desde antes de que me uniera a la pandilla!— gritó Yoon levantándose del suelo a duras penas, señalando a Jack.

Y vaya, esta no tardó en gritar en llanto.

Esto es obviamente lo que ustedes creen. Tres chicas amargadas y una medio despechada se habían emborrachado, con la simple finalidad de olvidar todo.

—¡Ah, no llores, Jack!— se quejó Yoon mientras Hyuna estaba enrollando un porro. —¡Sabías perfectamente que eso sucedería! ¿No habías visto que se iba al WalMart sin camisa? ¡por san pedro!—

Jack lloraba desconsoladamente, Hyuna se había metido a la boca su gordo porro y Yoon se tambaleaba por toda la habitación.

—¡Pero él fue quien me dio la mano en la playa!— chilló Jack tomando la almohada de corazón y golpeó su cara con dicho objeto.

—¡Ahh, puras babosadas!— Yoon sacudió sus brazos. —¡Te quería follar y chao cheo, Jack!—

Nuevamente, la despechada comenzó a llorar.

—¿Saben algo?— dijo Hyuna totalmente borracha y haciendo un gesto con las manos. —A mi me gusta Minseok.— declaró apoyándose hacia atrás totalmente orgullosa por lo que había dicho.

Por primera vez en cuatro horas, Jack por fin dejó de llorar, se le quedó mirando sorprendida a Hyuna. Yoon que estaba parada y dándoles la espalda, volteó con un gesto de furia.

—¡Mamagueva!— Yoon corrió hacia Hyuna y la tomó del cuello intentando ahorcándola. —¡Hi-ja de pu-ta!—

—¡Yoon!— gritó Jack.

Hyuna estaba como una muñeca de trapo, no podía escaparse de las manos de Yoon.

—¿Te gusta? ¿te gusta Minseok?— preguntó Yoon siguiendo con su trabajo. —¡Ve y chúpale el prepucio!—

—Ugh, Yoon...— emitió Hyuna sin poder casi hablar.

—¡Yoon ya basta!— se acercó Jack e intentó quitar las manos del cuello de Hyuna, pero Jack frente a la fuerza de Yoon era como una bebé de seis meses.

—Si... me gusta...— susurró Hyuna aún sufriendo. —¿Y que hay de ti? ¿te gusta?—

Yoon abrió los ojos. Jack dirigió su mirada sorprendida hacia Yoon, mientras que Hyuna hizo un gesto de orgullo. La  chica soltó repentinamente el cuello de su hermana, anonadada se echó para atrás. Hyuna comenzó a toser y no dudó en tomar nuevamente la botella y tomar un gran trago.

Jack estaba a la expectativa, ¿que coño acababa de pasar?

—¿Que?— preguntó Hyuna seguida de una risa incrédula. —¿Acaso te comenzó a gustar?—

Yoon subió la mirada, con un gesto serio y firme en los ojos, fue suficiente como respuesta.

Hyuna se cubrió la boca mientras sacaba cortas risas totalmente sorprendida, no podía creerlo. Jack abrió los ojos como un búho sin poder analizarlo, esto no podía ser creíble.

𝐆𝐀𝐍𝐆𝐒  ──  𝐾𝐼𝑀 𝑀𝐼𝑁𝑆𝐸𝑂𝐾Donde viven las historias. Descúbrelo ahora