El día estaba estaba oscureciéndose y la furia de Yoon no bajaba en absoluto, mientras caminaba daba fuertes pasos y con sus puños bien cerrados, al caminar no paraba de pensar en como trataría al verle el rostro a Minseok, en su mente no podía evitar planear un plan de venganza pero nada divertido se le venía a la cabeza, ¿que estaba sucediendo? Ella es una experta en venganza y violencia, es por eso que sigue esta chica sin novio.
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Yoon llegó al puente en donde esperaría a Minseok, miró al horizonte como si estuviera en una película tratando de calmar su impaciencia.
Ella no tenía la opinión de ella misma sobre un chico como Minseok, él es malo y burlón, algo que Yoon no le agradó para nada. Yoon sentía cierta atracción por los chicos malos, pero si todos los chicos malos fueran como Kim Minseok pues Yoon lo lamentaría mucho y tendría que enamorarse de un contador o de alguien bastante inteligente.
Había algo que Yoon no lograba superar por nada en el mundo, la gran nalgada que le dio frente a miles de pandilleros. Esa noche era para arrancarle la cabeza a Minseok en menos de cinco minutos, pero Yoon aceptaba continuamente dentro de su mente es que gracias a Dios que Minseok la salvó de la gran vergüenza que pasó, era preferible terminar siendo nalgueada por un chico tan malo con Minseok que terminar como la tonta de pies de hule que se calló frente a todos interrumpiendo la batalla de baile, aunque no era la manera más correcta de salvar a Yoon solo dándole una nalgada.
Las horas pasaban y Yoon lo veía por ningún lado a Minseok venir, siendo a pie o con su motocicleta. El cielo se estaba oscureciéndose, Yoon solo miraba pero no veía nada. La chica suspiraba algo frustrada por no ver a ese chico llegar, Yoon miró a su izquierda y allí estaba una pequeña tienda donde vendían comida y refrescos, ¿porque no ir mientras espera al desgraciado?
Se alejó de donde estaba y se fue a la tienda. Entró y había mucha luz en esa tienda, bastante arreglado y agradable, buscó algo para tomar y que sea refrescante entre otra cosas más.
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Llegó hasta la caja registradora y se puso hacer la fila para pagar, frente a Yoon estaba un chico con gorra y chaqueta de cuero la cual tardaba mucho para pagar e irse de la tienda.
