El sol comenzó a salir tocando las orillas de la cama de la chica que dormía profundamente, la luz se desplazó hasta llegar a la pared interrumpiendo su sueño.
Rápidamente su cabeza se levantó, salió de la cama y fue a cerrar las cortinas de su ventana con cierto odio al sol, Yoon se devolvió hacia su cama para volver a dormir plácidamente, pero justamente a lado de Yoon había un gran espejo que dejaba ver una mancha sobre el hombro descubierto de la chica al usar un suéter tan grande.
Con curiosidad se acercó y no dudó en seguir examinando su hombro, el resultado de esta exanimación fue abominable para ojos de afuera. Su hombro estaba con un gran moretón que ocupaba todo la zona de su hombro. Ella se frotaba los ojos para intentar ver que era una alucinación pero ella estaba más que clara que donde provenían esos grandes moretones, la chica pasó su mano con suavidad para evitar algún tipo de dolor, presionó un poco sobre la piel y un dolor inquietante recorrió toda la zona.
Más que asustada la chica quitó el resto del suéter por la zona del hombro para atrás, allí fue cuando la chica se asustó cuando vio que el moretón no acababa en su hombro, se esparció por una zona de la espalda. La chica no sabía si sorprenderse o dejar que eso le diera igual, esto ocurría desde pequeñas, no había profundidad en este tipo de líos.
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Sus ojos se abrieron más cuando pudo ver su mano al quitar el resto de la tela de su hombro, sus nudillos estaban pintadas de un fuerte color púrpura. Sentía su mano palpitar y lo miraba con detalle. Era increíble a que nivel había llegado.
Asustada y sin dejar de mirar al espejo, corrió hasta su cama y tomó el suéter más grande que tenía con prisa, tomó un par de zapatos y tomó un bolso. Buscó entre sus cosas y agarró lo más importante para guardarlo en su bolso. Rápidamente la chica se fue hacia la ventana y la abrió con prisa, volteó hacia la puerta de la habitación estando alerta a que nadie llegara y la atrapara.
Saltó desde la ventana y huyó de casa.
Caminaba rápido por la calle y miraba varias veces hacia atrás. Sus pies de ir a un ritmo calmado fue aumentado, la chica comenzó a correr como si estuviera escapando de algo, de una bestia o de un problema. Corría con velocidad por las calles intentado de huir lo más lejos de todos los problemas que caían a sus hombros, cualquiera que la estuviera viendo pensaría que alguien la está persiguiendo.
Como si un feroz lobo estuviera persiguiéndola para devorar a la pobre chica, que si la chica llegara a tropezar el lobo se haría cargo y comérsela con violencia, ese lobo era como los problemas persiguiendo a Yoon.
La chica decidió ir a un lugar que trataría de calmarla y que siempre la tratarían como una princesa. Fue hacia la cafetería que estaba frente a su universidad y entró. Se sentó en uno de los asientos cerca de la ventana, necesitaba pensar.
Su corazón latía con velocidad, como si hubiera escapado de casa para siempre y jamás volviera. La cual no era mala idea pero debía mantener la posición y no provocar más problemas de los que tenía ya acumulados, aguantaría solo dos semanas más y si algo más sucedía entonces haría de su vida lo que ella quisiera.
