Yoon caminó y buscó en la cocina algo para comer, tenía hambre a pesar de la cantidad de cosas que comió en la cafetería en la tarde de hoy, además si era por ella no estuviera buscando entre las gavetas de madera más comida, sino su malteada de chocolate que gracias a ese idiota que casi la mata en una calle lo derramó.
—¡Mierda! olvidé buscar la comida.— golpeó su frente mientras cerraba los ojos.
Olvidó por completo la comida de sobra que quedó en la cafetería, gastó su dinero allí, no mucho pero lo gastó.
Entre las gavetas de madera encontró pan, tomó dos y los dejó colgando en su boca, tomó un vaso y se sirvió algo de chocolate frío del refrigerador. Yoon volteó y subió las escaleras para ir a su habitación, estaría allí estudiando para el examen de mañana que es bastante difícil según Yoon, era peor que aprender un nuevo idioma y no cualquier idioma, sino el chino.
Sus padres no estaban y su hermana se había ido para follar con su "mejor amigo" Yoon tenía la casa solo para ella y si, ella solo escogió ir a su habitación a ver los cuadernos por unos cuantos segundos y luego rendirse fácilmente.
Subiendo las escaleras oyó un ruido que proviene del techo, Yoon se asustó y miró hacia arriba.
—No vengas tu, tengo que comer y estudiar.— gritó hacia el techo.
Continuó subiendo las escaleras y otro ruido se escuchó pero esta vez más cerca, del miedo Yoon corre por los pasillos sin poder ver nada, ya que todo estaba oscuro allá arriba. Como una ciega inexperta con sus manos tocó todo lo que se le atravesara hasta que sintió con sus manos la manilla de la puerta fría, esa era su habitación o eso creía. Entró a la habitación oscura y sin saber si era su habitación o la de su hermana, dejó el vaso con chocolate en una mesa que ella creía que estaba a su lado pero lo que hizo cambiarle de opinión fu que cuando soltó el vaso y de inmediato se escuchó el vaso romperse.
Yoon saltó y buscó por todas partes el botón para encender la luz pero aún no lo encontraba, avanzó y un escalofrío paso por su cuerpo al sentir como un viento frío pasó por su cuerpo, notó que la única luz que podía ver era la que provenía de la ventana, estaba abierta. La poca luz era proveniente de la pequeña luna que estaba dibujada en el cuelo oscuro y aun así ella no podía ver nada.
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Sus manos nunca de detuvieron en tocar todo tipo de cosa para poder ver como encender la luz de la habitación. Ella sintió como alguien más estaba en la habitación, la estaba observando y camuflando.
Yoon avanzó y sus manos tocaron algo con una tela gruesa sobre ésta, sus manos trataron de identificar que objeto era pero no lo logró, ambas manos palmeaban sobre aquel objeto.
—Además de violenta, traviesa.— dijo una voz masculina que provocó que Yoon echara un grito al notar que tan cerca estaba.
