Say my name (J Quiles) Terminada

Epilogo

(Un año después)

- ¿Qué tal?- mire a Rauw.

- Ven pa' aca- tomó mi mano y me dio una vuelta- Así se ve Nicole Cuevas cuando se baña- golpee su hombro.

- Bobo- rio.

- ¿Estas lista?- asentí.

- Estuve lista desde que lo conocí en ese Club, estuve lista desde la primera cita Rauw- sonreí.

- Estás bien enchula'.

- De a madre- reímos.

- Vamos pues- tome su brazo y comenzamos a caminar.

Miré a toda la gente a mi alrededor, solo estaba aquí las personas que entendían esto y estuvieron ahí siempre.
Mire a Nio que tenía a la pequeña Kai de tan solo cuatro meses en su brazos, era la princesa de Justin.
Finalmente llegamos al altar y miré a Justin con una sonrisa, quería llorar y lanzarme a sus brazos.

- Te dejó a mi mejor amiga, es lo más Preciado que tengo, cuídala- reí.

- Rauw, la cuido desde que la conocí- tomó mi mano y la besó.

- Estamos aquí para unir dos almas en santo matrimonio- mire a Justin con una sonrisa.

Lo único que podía pensar era en lo feliz que era a su lado y en la hermosa familia que habíamos formado, lo amaba con locura y nada podía cambiar eso.

- Ahora sus votos- asentimos.

- Nicole, desde que te conocí pusiste mi mundo de cabeza, y todos los días siento como si fuera la primera vez, porque todos los días buscas una nueva forma para que me enamore más de ti- limpié mis lagrimas- porque de enamore de ti desde la primera que dijiste mi nombre, desde la primera vez que te vi a los ojos supe que nunca iba a dejar de verlos porque prometo hacerte la mujer más feliz del mundo y prometo amarte hasta que deje de respirar- todos aplaudieron y yo seque mis lagrimas.

Definitivamente amaba a este hombre con locura.

- Rafael- rodó los ojos- cuando te conocí pensaba que yo no merecía nada bueno en la vida, que estaba destinada a quedarme viviendo con mi mejor amigos y muchos gatos a nuestro alrededor- reímos- pero tú me hiciste darme cuenta que merezco cosas buenas y una de esas eres tu- acaricié sus mejillas- con esa labia barata y esa hermosa sonrisa pusiste mi mundo de cabeza y prometo no volver a separarme de ti porque yo también quiero amarte hasta que deje de respirar- sonreí y nuevamente todos aplaudieron.

- Justin Rafael Quiles, aceptas a Nicole Cuevas para amarla y respetarla, en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad ¿hasta que la muerte los separes?- asintió.

- Acepto y si me lo pregunta cien veces diré lo mismo- reí.

- Nicole Cuevas, aceptas a Justin Rafael Quiles para amarlo y respetarlo en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad ¿hasta que la muerte los separe?- asentí.

- Acepto- sonrío.

- Sin más que decir los declaró marido y mujer, puede be...- el padre no terminó porque Justin tenía sus labios sobre los míos.

Todos comenzaron a aplaudir pero yo solo le prestaba atención a nosotros dos, este momento era nuestro.

- Ahora eres la señora Quiles- sonreí.

- Nicole Quiles suena cabron- río.

- Todo salió bien- asentí.

- Si estamos juntos todo será así siempre- acaricié su mejilla- te amo.

- Y yo a ti- volvió a besarme.

(...)

(Una semana después)

- Es hora de dormir Kai- deje a la pequeña en su cuna y apague la luz de su habitación.

Prendí su móvil y el monitor pero me quede un rato más viéndola. Era muy parecida a mi y eso me encantaba.

- 30 años y ya es dueña de una academia de baile, mai' de dos bebes y toda una empresaria ¿hay algo de usted que no me vuelva loco?- reí.

- Papi, esos trucos ya los han aplicado conmigo- salimos del cuarto.

- ¿Ah si? ¿Quien?- me abrazo por la cintura.

- El pai' de mis nenes- lo abrace por el cuello- mi esposo, tal vez lo conoces.

- ¿Como se llama?- apretó mi trasero.

- Justin Quiles.

- Es bien afortunado de tener una familia tan linda- sonreí.

- Y yo soy afortunada de tenerlo- acaricié su mejilla- te amo.

- Y yo a ti Nicole, como no te imaginas- pasó un mechón de pelo por detrás de mi oreja.

- Vamos a dormir nosotros también- asintió y caminamos hacia el cuarto.

Y así es como terminaba esta historia de amor, con una familia feliz y un amor puro, Justin y yo éramos el uno para el otro, nadie podía dudarlo. Y lo supe desde que dije su nombre por primera vez.
Y pensar que todo esto había comenzado por intentar no romper mis propias reglas, pero ahora estoy aquí con una hermosa familia y un gran hombre, era todo lo que soñaba, era Justin Quiles...

Fin.