𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 9

7.9K 1.2K 460
                                    

A la mañana siguiente el menor se despertó con un buen humor, el sol era radiante y el clima fresco, no valía la pena quedarse en su departamento cuando todo era tan hermoso afuera.

- Salgamos a dar un paseo - sugirió animado al mayor, quien solo asintió sin mucha importancia.

Tener caminatas mañaneras era uno de sus hobbies mas favoritos desde que comenzó a vivir solo, sin embargo en esta ocasión el clima no estaría a su favor y un simple error como el de olvidar ver el pronóstico en la televisión le costaría muy caro.

El parque a varías calles de su departamento se destacaba por ser muy poco concurrido y relajado, era el lugar ideal para dar un paseo, el ambiente era agradable y le daba la oportunidad de meditar sobre sus problemas con tranquilidad.

Para la entidad este sitio le pareció demasiado silencioso, la poca presencia de personas le daban esta característica, sin embargo el castaño le otorgaba otro tipo de temática a este paisaje, casi podía jurar que hasta los árboles lograban sentir esa energía que solo jisung transmitía con su mísera presencia, era una sensación difícil de explicar y por alguna razón le molestaba, por el simple hecho de que lo hacia sentirse extrañó y eso no estaba para nada bien.

El paseo iba de lo mas tranquilo cuando de pronto un fuerte viento azotó el lugar dando a entender que se avecinaba una tormenta dentro de unos minutos.

- Deberíamos volver - sugirió el castaño considerando que esto era mas como una advertencia para regresar lo mas pronto posible a su departamento, pero desgraciadamente el camino sería muy largo y el 99% de posibilidades le aseguraban que iban a ser azotados por la lluvia.

Tal y como predijo las nubes oscuras rodearon todo el cielo y no tardo en comenzar a llover con intensidad.
El menor al sentir las frías gotas empapar toda su ropa se apresuró a tomar la mano del azabache y comenzar a correr como si su vida dependiese de ello.
Este se sorprendió por la acción y lo siguió aun aturdido por el tacto, sentía una corriente eléctrica comenzar desde su mano hasta recorrer todo su cuerpo y por último agitar su corazón.
¿Cómo podía una simple acción provocarle todas estas emociones?, ¿Era siquiera normal en un demonio?

Ambos recorrieron un par de cuadras hasta detenerse debajo de un árbol grueso donde la lluvia no los encontrara.
Ya en este sitio el mayor se apresuró en tirar de su mano para alejarla de Jisung, estar en esta situación lo incomodaba demasiado.

- lo siento - se disculpó muy apenado - Por cierto, tienes las manos muy frías - comentó algo extrañado.

Y tu muy suaves....

Había olvidado por completo camuflar su temperatura.

- ¿Alguna vez hablaremos mas de dos palabras? - se atrevió a preguntar después de varios segundos, estaba desilusionado por no obtener ninguna conversación de por lo menos 5 minutos con el azabache.

Este lo observo por cierto tiempo hasta finalmente decepcionar aún mas al menor con su respuesta.

- No.

El castaño asintió inconforme y continuó con un incómodo silencio.

La lluvia felizmente había culminado, convirtiéndose ahora en un simple y ligero chubasco, Jisung considero adecuado regresar a su departamento, la temperatura estaba bajando y temía quedar resfriado por no haber llevado un abrigo.

En medio del camino se encontró con un misterioso niño empapado por la lluvia, este se acercó a ellos y pidió un par de monedas, el castaño por obvias razones busco en sus bolsillos algo que ayudará al menor.

- Ten esto - le entrego todas las monedas que encontró y sacudió ligeramente su cabellera con cariño - ¿Tienes dónde esconderte de la lluvia? - le pregunto con preocupación.

𝗘𝗟 𝗣𝗥𝗔𝗞𝗟𝗢𝗢 . 𝑀𝒾𝓃𝓈𝓊𝓃𝑔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora