Capítulo 58

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-Ahora entiendo a lo que se refería mamá-hizo una mueca de disgusto luego de tragar aquella sopa-...La comida de hospital es horriblemente insípida. Ni aquel jugo de mora con sal que me dieron por error sabía tan mal, ¿Puedo dejar de comer? De verdad que ya se me quitó el apetito con tremenda sensación de disgusto que me dejó esa sopa

Bora solo sonrió por la queja de la menor mientras tomaba una nueva cucharada de la sopa que había traído una enfermera hace poco, y la puso frente a la menor.

-La comida de hospital es insípida porque está planeada principalmente para que los pacientes no vayan a tener alguna complicación con el azúcar o con la sal-se encogió de hombros-es...Una forma de ser ¿Igualitario con la comida? Por decirlo de alguna manera

-Pues vaya igualdad-se quejó viendo con disgusto la cucharada sopera que le ofrecía su novia-¿De verdad tengo que comerla?

-Hasta que el plato este completamente vacío-Siyeon hizo un puchero-aunque amo tus pucheros, esta vez no van a funcionar, así que mejor di 'aah' para terminar cuanto antes

Siyeon se cruzó de brazos mientras fruncía el ceño y abría su boca para recibir a regañadientes la cucharada de aquella sopa que estaba comenzando a odiar y a mandar al mismísimo infierno con Lucifer.

'Aunque dudó que Lucifer deje que semejante cosa entre a su reino' pensó

-Cuando el oficial Kim vino a hablar contigo-Bora miraba el plato de la insípida sopa-¿Qué te pregunto?

-Ugh-hizo una mueca apenas paso la sopa por su garganta-...Me preguntó sobre lo que me había dicho cuando comenzó a atacarme con el cuchillo y pues le dije que no habían sido solo dos intentos de asesinato sino que habían sido tres con el intento de atropello-Siyeon estiró su cuello de lado a lado al sentirlo tenso-y solo me dijo que se encargaría de que Ravn no se salga con la suya. También mencionó que se quedaría en las cámaras de seguridad del hospital por si llega a haber alguna anormalidad o algo sospechoso alrededor de mi habitación

-¿Y tú crees que Ravn se atreva a venir a hacerte algo aquí, en el hospital?-preguntó sintiéndose algo inquieta por aquella posibilidad

-Muy posiblemente-respondió con tranquilidad tomando por sorpresa a la castaña-si intentó tres veces acabar conmigo, no me sorprendería que hubiera una cuarta. Él tiene tan poca vergüenza para venir aquí, sabiendo que lo pueden descubrir, con tal de acabar conmigo...Realmente no sé que hice para tener tremendo idiota acechándome como un maldito animal a su presa-suspiró para evitar que las malas sensaciones la invadieran-...Pero no hablemos de eso ¿Si? En estos momentos solo quiero tener mi mente en blanco y terminar de comer esa...Inmunda sopa de hospital

Bora asintió ante el pedido de la menor y le sonrió levemente para continuar dándole su comida.

Bora asintió ante el pedido de la menor y le sonrió levemente para continuar dándole su comida

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Dio tres toques a la puerta y espero algo impaciente a que su amigo la abriera.

-Primero me mandas a medianoche a un hospital justo cuando iba a dormir y ahora vienes a invadir mi casa-Seoho se hizo a un costado de la puerta para que Ravn pudiera entrar-¿Acaso no tienes algo más interesante que hacer con tu vida?

-Pues yo no tengo la culpa de que dos patrullas de policía estuvieran frente a mi casa apenas regresé del aeropuerto-dijo el castaño mientras se quitaba sus zapatos junto a aquella chaqueta negra que llevaba utilizando ya desde hace rato

-Claro que es tu culpa-el menor cerró la puerta-al fin y al cabo eres tú quien llegó al extremo de intentar matar a alguien. Y digo intento porque menudo inútil eres para matarla como se debe

-¿Podrías solo callarte y decirme dónde está el maldito baño para poder darme una ducha?-el mayor comenzaba a sentirse irritado

-En el piso superior al fondo y a la izquierda-le respondió

-Gracias-dijo entre dientes siguiendo las indicaciones del menor

Luego de tomarse una larga ducha se colocó una nueva muda de ropa que había traído consigo en su auto.

-¿A dónde vas ahora?-preguntó Seoho que estaba recostado en el sofá de la sala viendo televisión

-Ni te incumbe, ni te interesa-le respondió tomando una de las gorras que el menor tenía colgadas en el perchero del vestíbulo de la casa-me quedaré con una de éstas

Abrió la puerta principal de la casa y caminó hacia su auto. Entró en él, cerró la puerta, puso la gorra que había tomado anteriormente en el asiento del copiloto y encendió el coche para conducir rumbo al hospital.

Se mantenía callado y centrado en ver hacia al frente en la carretera.

Apenas llegó a su destino estacionó su auto en el parqueadero, apagó el motor del coche, quitó las llaves, tomó la gorra del asiento del copiloto y salió del auto para comenzar a caminar hacia la entrada al hospital.

Puso la gorra sobre su cabeza y la acomodó de tal manera no se viera su rostro por completo y con facilidad. Ingresó al lugar y se acercó al mostrador donde estaba la recepcionista.

-Buen día hermosa-la saludó con una sonrisa-¿Podrías decirme cuál es la habitación de la señorita Lee Siyeon?

-Claro que sí-dijo algo embobada con el físico del chico-habitación 103 guapo

-Gracias linda-le guiñó un ojo antes de retirarse para ir hacia donde la había indicado

'Vamos a ver ahora quién te salva Lee' bajó un poco más la gorra que traía puesta para cubrir su rostro lo mejor posible

A mis piesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora