11 Oleaje cambiante

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Durante la vuelta al castillo de Azuchi vi a unos hombres algo sospechosos asomándose por un callejón. Por lo poco que se dejaban ver se podía avistar sus ropas, diferentes a los viandantes de allí, sin lugar a dudas, eran piratas. Eché un vistazo a Motonari que los miraba de forma fría y distante. Al llegar a su altura uno de ellos le llamó.

-¡Capitán! Necesitamos hablar contigo un momento.

Motonari les hizo una señal para ir hacia el callejón de nuevo.

-¡Bueno, muchachos! Pasadlo bien, volveré yo sola...

-Tú te vienes conmigo, no estoy tan loco como dejar que escapes, ¿savvy?

De esta manera de i arrastrada por la marea de piratas.

-Pensé que me había explicado lo suficientemente bien.

Uno de ellos intentó calmarle.

-Sí, actúas bajo el nombre de Shoujomaru para llegar hasta Nobunaga...

Motonari cerró su mano sobre la empuñadura de una daga que ocultaba en su kimono.

-Si lo pilláis ¿POR QUÉ?_ bajó la voz_ ¿Por qué intentáis echar por la borda todos mi esfuerzos?

El filo de la espada estaba ahora en el cuello de uno de ellos.

-Perdona, capitán.

A pesar de ser piratas aquellos hombres temían por su vida en ese momento. A pesar de ser una mera espectadora también sentía esas vibraciones con las que me tenía acostumbrad a vivir.

-Hacedlo otra vez y sois hombres muertos.

-Sí, capitán.

Motonari bajó la espada y a pesar de no haber derramado sangre la limpió antes de volver a enfundarla.

-¿Qué es tan importante que no puede esperar?

-¡Tenemos problemas!

-¡Han cerrado todos los puertos en Aki! Nuestros barcos no pueden entrar.

Motonari frunció el ceño.

-¿Qué ha ocasionado eso?

-El "jefazo"_ dijo uno de ellos torciendo la boca.

¿A quién se refería con jefazo?

-Será hijo de..._ tragó sus palabras_ Te arrodillas una vez y se cree que puede hacer lo que quiera contigo.

Uno de los piratas se frotó el cuello.

-¿Qué hacemos con él?

EL pirata de cabello plateado se llevó la mano al mentón.

-Es una herramienta necesaria. Pero el tipo más desagradable con el que he tratado nunca. Mierda, iré a apaciguarle yo mismo.

¿Se referiría a Kicho? ¿O sería otro aliado del que no tenía todavía conocimiento?

-Entonces, ¿tienes que dejar Azuchi?

Motonari le lanzó una mirada peligrosa.

-¿Crees que te vas a librar de las cadenas? ¿Esa sonrisa es fruto de la libertad que tanto ansías? Siento decepcionarte m'lady, pero te vienes a Sakai conmigo.

¿Cómo? ¿Por qué? ¡Había vuelto a Azuchi con los demás y lo que menos quería era dejarlos sin decir nada!

-¿Y si me niego?

-Entonces te ataré, amordazaré y arrastraré yo mismo hasta allí. ¿Es lo que quieres?

-Supongo que Nobunaga no le gustará que desaparezca tan repentinamente.

Motonari x OC COMPLETO (Ikemen Sengoku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora