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Syd

Advertencia : contenido sexual, lenguaje inapropiado, consumo de drogas y alcohol.

—¡Carajo!—grito el castaño frente a ti, tu lo mirabas con tristeza y odio, mientras el te mira con depreciación

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—¡Carajo!—grito el castaño frente a ti, tu lo mirabas con tristeza y odio, mientras el te mira con depreciación.

—syd, por una maldita vez en tu miresable vida creme, solo era un amigo del trabajo —le devolviste el grito, mientras llevaste tus manos a tu cabello y lo empezabas a frotar con frustración.

El ojiazul caminaba de lado a lado, mientras te miraba— así que mi vida es miserable.

Suspiraste sabiendo que tendrían una pelea más, los celos de Syd, sus problemas de adición y problemas de irá, siempre los hacían discutir, seguías con el porque sentías amor. Pero hasta cuanto dura el amor, cuando el dolor llega y le quitó el lugar que habitaba.

—¿Por qué carajos siempre es lo mismo Syd?—le reclamaste, acercandote a él y mirando directamente a los ojos—. Siempre peleamos.

—por dios "T/N", ese hombre te comía con la mirada y mira como vas vestida —te miro de arriba a abajo, encontrándose con una falda corta dos dedos arriba de tu rodilla, tus tacones negros y una blusa blanca.

—¿Cómo voy vestida?—preguntaste, mirándolo mal, sabías que si por el fuera estarías en la casa las veinticuatro horas del día.

—tu sabes, como —dijo, caminando asea el mini bar, era evidente que tomaría y tú estabas cansada de está situación. De siempre estar tratando de solucionar todo de mirar a otro lado cuando se drogaba.

—¡Te odio!—le gritaste, caminado detrás de él. Syd se volteo y te miro cuidadosamente, analizandote—¡Te odio! Ya no quiero esto, ya no quiero sufrir por tu maldita culpa —le reclamaste, mientras dabas pequeños golpes, sentiste como tus ojos ardían y como tus lágrimas querían salir.

—¡Ey baby! —dijo, tomando tus muñecas para que te calmarlas, pero tú solo sentiste tu corazón estrujarse cada vez más, ya no querías sufrir, pero no querías dejarlo, estaba entre la espada y la pared—. Calma bebé —trato de tranquilizarte, pero tus golpes solo lo empujaron hacia atrás y calleron en un sofá blanco.

Syd te abrazo y te beso, al principio no le correspondiste el beso, pero el movimiento de sus labios hizo que lo hicieras, provocando un beso de lujuria y pasión.

Syd solo estaba en una pequeña toalla, la cuál no cubría muy bien su miembro erecto, jadeaste al sentirlo sin romper el beso de ambos. El castaño oscuro bajo sus manos hasta tus muslos y las subió por debajo de tu falda descubriendo que no tenías bragas, se sintió confundido ya que apenas habías llegado del trabajo y junto con ese tipo. Sin embargo su odio no lo consumió del todo, ya que siguió besandote y tocandote.

Gritaste al sentir como un dedo entraba en ti, sin previo aviso, te separaste de los labios de tu novio y el empezó a mover más brusco su dedo dentro de ti, haciendo que gimieras.

—syd—gemiste sobre tu odio, mientras el seguía follandote con su dedo, bajaste tus manos y le quitaste la toalla blanca que lleva encima. Gemiste más al sentir su larga longitud bajo de ti.

El chico de ojos azules, saco su dedo de ti provocando un puchero en ti. Su mente voló y se imagino cualquier escenario posible por el cuál no traías bragas, cada escenario peor que el otro y con una adrenalina y odio, te sento arriba de el, haciendo que gritaras de placer y dolor al sentirlo dentro de ti.

—dime que me amas —gruño, mientras miraba como movías lentamente tus caderas—. Dime qué no me engañas, dime qué no me dejaras.

Te mordiste un labio al sentir la primera estocada, tu placer te llenaba y no prestarte atención a las preguntas anteriores hasta que una mano azotó tu glúteo.

—respondeme —ordeno, haciendo que trataras de recordar lo que dijo.

—te amo —gemiste, saltando sobre el —. Eres el único y nunca te dejare —¿Le decías la verdad? O le mentías solo para obtener tu orgasmo.

Syd sonrió y sintió como apretabas su polla, haciéndolo gemir, sabía que ya estaba cerca tu orgasmo y el de el.

—vamos baby, correte para mí —dijo, tocando uno de tus pechos sobre tu blusa y haciendo que te corrieras, poco después el te siguió y se corrió dentro de ti. Haciendo que calleran sobre el y recostaras tu cabeza en su hombro.

—"T/N"—te llamo y tú solo contestaste con un "hum" —¿ Por qué no llevas bragas? —te sentías tan agotada para responder, pero aún así lo hiciste ya que si no lo hacías habría una pelea más.

Levantaste tu cabello un poco y le susurraste al odio —estaba pesando en ti y solo... Paso lo que paso, las tengo en mi bolsa —dijiste, cayendo nuevamente en su hombro. Syd te quito sobre de el y te dejo en el sofá, para ir a buscar tus bragas y al llegar a tu bolsa las encontró, tu lo miraste mal y suspiraste... El te hacía sentir bien y te llenaba en el ámbito sexual, pero ya no querías sufrir más, sabías que esa relación era más tóxica que un campo de radiación, no realmente exagerabas, pero te sentías mal con tantos celos y problemas.

Te levantaste del sofá y caminaste asea tu dormitorio, no sin antes darle una mira de decepción a Syd. Este se sintió mal por no creerte y fue detrás de ti, pero cuando iba a entrar a la habitación le cerraste la puerta en la cara y con seguro.

—amor, hablemos yo...perdon—se disculpo, pegando su cabeza sobre la puerta y esperando a que lo abrieras, pero le abriste, solo escuchaba tus sollozos y se sintió como una mierda al dejar que te sintieras asi por su culpa.

[...]

Estabas aguardando tus cosas para irte a París, la propuesta de trabajo que tuviste fue muy buena y además estarías mejor lejos de Syd. Syd no estaba en casa no sabías donde estaba, probablemente consiguiendo sus drogas, pero ya no aguantarías eso más.

Tomaste tu maleta y saliste casi corriendo de ese departamento, llegaste al taxi y suspiraste de alivio, mientras el taxista manejaba hacía el aeropuerto.

Syd llegaba a su departamento, tenía un regalo en su mano, era su aniversario ( el cuál olvidaste) el estaba feliz, ya que te iba a decir que iba a ir a rehabilitación. Te busco por todo el departamento y no te encontró, tragó con dificultad y se sintió tan dolió y traicionado, que empezó a romper cada una de las cosas que estaba en el departamento.

Una semana después

—¡Diablos! —maldejiste, al ver la prueba de embarazo dar positivo.

















Holiiiiiii, espero y les guste os. Acabo de ver London nuevamente y se me ocurrió este os, espero y lo disfruten. 💙🍒

No olviden que los amo y que tengan bonita tarde 💙🍒

𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐒𝐓 𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora