Twenty eight

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Roger y Scarlett ya habían puesto en marcha el plan del casamiento. Freddie había insistido en ayudarlos con la organización, y Mary también.

Una tarde de jueves se habían juntado a tomar un café, luego de que las chicas salieran de trabajar y los chicos salieran de grabar para su próximo disco.

— Escucha, las orquídeas no deben faltar. — Lo señaló Freddie sacando un gran libro de organización para bodas. Scarlett soltó una risa.

— Creo que eso podemos dejarlo para el final, Fred. — rió Scarlett mientras Roger tomaba el libro y comenzaba a hojearlo curioso, parecía bastante entusiasmado con el tema de la boda.

Últimamente solía hacer comentarios sobre lo lindo que le quedaría el vestido que Scarlett eligiera, comentaba que el color crema no es lo mismo que el color hueso en las servilletas, y que la melodía en la entrada a la iglesia tenía que ser emotiva pero no demasiado lenta. A Scarlett le sorprendió y enterneció el entusiasmo del rubio, sabía que estaba haciendo una buena elección al casarse con él... Bueno, a empezar a salir con él desde un principio.

— Scarly tiene razón Fred, podríamos empezar con el civil. Nadie nunca habla de eso, y es lo que verdaderamente importa. — Roger comentó sin quitar la vista de las servilletas del libro con anillos de plata de decoración.

— Bien. No hay mucho que arreglar de eso, estoy seguro que Scarlett hará una increíble elección para su atuendo. — le guiñó un ojo. Scarlett sonrió y bebió un sorbo de su café.

— Es una sorpresa, para todos. Pero es verdad, no hay mucho que arreglar del civil además de que no haremos ninguna reunión por eso. Quiero una boda tranquila... — Roger la miró sorprendido.

— ¿A qué te refieres con tranquila? Querida, te vas a casar con Roger Taylor, debemos hacer una fiesta a lo grande. Todos van a ir.

— ¿Todos? Roger celebramos nuestro casamiento, unión del amor que nos tenemos... No estoy segura si debería venir gente que tú conoces pero que yo no ví jamás en la vida. — hizo una mueca.

— ¡Eso es! Invitaciones, podemos ir planeando las invitaciones. ¿Qué dicen? — comentó Mary cambiando de tema.

— Bien, podríamos empezar por las invitaciones entonces. — suspiró Roger tendiéndole el libro a Freddie nuevamente.

Aquél día organizaron cómo serían las invitaciones. El viernes la banda se encargó de elegir el salón de eventos que sería una sorpresa para Scarlett,sabría solo la dirección porque la vería en la tarjeta pero no podría ir a ver cómo era, o cómo quedaría el resultado final hasta el día de la boda.

Las siguientes semanas, entre los cuatro arreglaron todos los detalles siguientes, decoración del salón, banquete, comida, música, entretenimiento y todo lo demás. Habían elegido la Catedral de San Pablo, ya que era grande y espaciosa para todos los invitados.

Por otro lado, luego de la primer gira de Queen, la gente ya comenzaba a reconocer a Roger por todos lados. A menudo solían pararlo para pedirle autógrafos, fotos y hasta los paparazzis solían seguirlo. Ahora debían andar con cuidado, pero a Roger no parecía molestarle mucho aquel mundo de fama, sino más bien parecía disfrutarlo sonriéndole a las cámaras y posando cada vez que lo encontraban. Era como si hubiera nacido para eso, y es que Scarlett lo comprendía, el además de ser un gran músico, y de ser realmente hermoso llamaba la atención a dónde iba, era imposible no reconocerlo o quedarte mirándolo.

Una tarde, cuando salían de un local de textiles los cuatro amigos, como de costumbre ya habían paparazzis afuera del local esperando con sus cámaras colgando del cuello, algunos ya comenzaban a fotografiar y otros comenzaban a hacer varias preguntas, pero no solo a él sino a Freddie también, puesto que era un ícono de la música muy reconocido

A Kind Of Magic | Roger TaylorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora